La provincia de Pontevedra aglutina casi el 60% de las embarcaciones dedicadas a la acuicultura en toda la comunidad autónoma, una actividad clave en la economía de las zonas costeras. Así se desprende de los datos contenidos en el Rexistro de Buques Pesqueiros, que indican que actualmente la cifra de barcos dedicados a dicha actividad y auxiliares asciende a 1.276 en toda Galicia y, de ese total, 754 tienen su base en alguno de los puertos de las costas pontevedresas.
Más concretamente, 86 operan en la ría en la que desemboca el Lérez, 110 en la de Vigo y 891 en la de Arousa (si bien en este último caso 334 pertenecen a municipios de la cara Norte, es decir, situados en territorio coruñés, y 557 están en la cara Sur o pontevedresa).
El liderazgo de la provincia en este sector se traduce en una importante aportación a su economía, pues, de acuerdo con los datos que maneja la Consellería do Mar, el valor de la acuicultura superó el año pasado los 207,6 millones de euros de facturación en Galicia y su volumen rondó las 279.000 toneladas de pescados y mariscos. Se trata de los mejores resultados registrados desde 2009, con un incremento de un 20% en la facturación y de más de un 15% en la producción con respecto a dicho ejercicio. En relación al año 2016, la subida fue de un 8% y de más de un 11%, respectivamente.
El máximo exponente de la acuicultura es el cultivo de mejillón, de ahí que Arousa sea la reina indiscutible del sector.
Según la D.O. Mexillón de Galicia, de las 3.337 bateas registradas en las costas gallegas, 2.292 (es decir, el 68,68%) está en aguas arousanas; mientras que las demás rías se mantienen a mucha distancia en el ranking de estos viveros flotantes: la de Vigo cuenta con 478 (el 14,32% del total), la de Pontevedra suma 346 (el 10,37%), la de Muros-Noia aglutina 118 (el 3,54%) y la de Ares-Betanzos suma 103 (el 2,09%).
Arousa reúne el 69% de las bateas existentes en las rías gallegas, lo que convierte a esta zona en la líder del sector acuícola
Todas estas bateas (distribuidas en 47 polígonos) pertenecen a cerca de 2.300 productores y emplean a más de 13.000 personas, no en vano Galicia es la principal potencia acuícola de Europa.
De hecho, en la costas de la comunidad autónoma el mejillón alcanza su talla comercial (70-95 milímetros) en unos 17 meses, frente a lo que ocurre en otros países productores, donde el período de cultivo para llegar a esa talla es entre dos y seis veces mayor.
En base a los datos del departamento autonómico de Mar, el cultivo de mejillón supone más del 95% de la producción total de la acuicultura gallega, con alrededor de 267.000 toneladas descargadas y alrededor de 122 millones de euros facturados el año pasado. La mayor parte de esas cifras se concentraron en la ría arousana y la provincia de Pontevedra acaparó casi la totalidad.
El incremento con respecto a 2016 ronda las 28.000 toneladas y los trece millones de euros, lo que constituye un balance realmente positivo para los profesionales de este ámbito.
Tal y como subrayó la Consellería dirigida por Rosa Quintana, el sector mejillonero fue el mayor beneficiario de las ayudas en inversiones productivas en acuicultura. De hecho, en 2017 se quedó con el 75% de estas subvenciones.
MARISQUEO. Además de la acuicultura, el marisqueo constituye otra actividad significativa para la provincia.
En toda Galicia hay contabilizadas actualmente 2.538 embarcaciones dedicadas a esta disciplina, de las cuales el 45% (1.149) tienen su base en alguno de los puertos pontevedreses, de acuerdo con el Rexistro de Buques Pesqueiros. Más en concreto, en los muelles situados en la ría de Pontevedra conviven 149 barcos marisqueros.
El sector, cuyas certificaciones son otorgadas por el Consello Regulador de Agricultura Ecológica de Galicia, ha experiementado un crecimiento muy destacado, teniendo en cuenta que su facturación pasó de los 104.000 euros contabilizados en 2012 a 1,3 millones de euros en 2016.
