A punto de concluir el empedrado de la nueva plaza de la estación

La firma Extraco, adjudicataria de las reformas exteriores, apura estos días la pavimentación de la futura intermodal
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photo_camera Nuevo empedrado de la futura plaza pública frente a la estación de autobuses. RAFA FARIÑA

Los viandantes que siguen a diario la senda de Os Gafos, quienes entran a pie o en coche por la avenida de Vigo hacia Campolongo y los usuarios de la estaciones de tren o de autobús son testigos estos días de la nueva pavimentación que lucirá la plaza exterior de la futura estación intermodal, el proyecto más caro que se acomete ahora mismo en el casco urbano, presupuestada en 5,5 millones de euros y financiada en un 75% por la Xunta y en un 25% por el Concello.

El nuevo empedrado deja ver lo que será el núcleo central de la humanización de la plaza frente a la estación, que irá acompañado de una reordenación del aparcamiento y del nuevo acceso de los autobuses, desde la calle Josefina Arruti, además del proyecto de recuperación y puesta en valor del entorno del río Gafos, donde ya se han demolido los muros y continúa la preparación del terreno donde más adelante será instalada una pasarela de madera para crear un nuevo espacio público de gran valor ambiental.

Está previsto que los trabajos finalicen antes de que acabe 2020, incluida la adaptación ambiental de un tramo del río Gafos

El objetivo del proyecto, según recordó recientemente la Xunta, es convertir las dos estaciones, la de autobuses y la ferroviaria, en un único conjunto. Para ello se están desarrollando dos actuaciones en paralelo. Por un lado se ejecuta un nuevo itinerario peatonal entre los dos inmuebles, que garantizará la intermodalidad y hará posible que la conexión sea más sencilla y segura; y por otra parte también se está llevando a cabo una remodelación integral de la estación de autobuses, con la renovación de la actual fachada, la cubierta, los interiores y una mejora generalizada de las instalaciones.

La conselleira precisó que durante las últimas semana se estuvo avanzando en la demolición del recrecido para adaptar la cubierta a las nuevas pendientes, además de trabajar en la instalación eléctrica y en la tabiquería del vestíbulo principal.

Las obras, en las que trabajan algo más de un centenar de operarios, están siendo acometidas por las empresas Alea y Arines, en lo que respecta a la mejora interior y de fachada de la estación de buses; y por Extraco en lo que afecta al recinto exterior.

Está previstó que la totalidad de los trabajos finalicen antes de la conclusión de 2020, salvo que se produzcan nuevos parones en el sector provocados por la pandemia. La última parada ocurrió durante el confinamiento, fue de varios días, pero no afectó a los plazos previstos para la futura intermodal.