En Palamios 7 había sensación de victoria, pese a quedar por detrás del incombustible Lores. Y no era para menos, las encuestas presagiaban una negra noche para el proyecto de Rafa Domínguez, no por la valía del candidato, sino por el pesado lastre del PP nacional.
Sin embargo, los pontevedreses premiaron el esfuerzo de los ‘populares’ otorgándoles 1.700 votos más (casi tres puntos por encima) que en 2015. Aunque de puertas afuera de la sede local el champán no corrió porque no se había logrado la Alcaldía, el final de la noche se celebró con más de un brindis por una medalla de plata con sabor a oro.
El propio candidato lo reconocía ante la prensa: "Hemos trabajado muchísimo, hemos presentado el proyecto y creo que en un contexto muy complicado para el PP a nivel nacional y autonómico, hemos sacado un resultado del que podemos estar moderadamente satisfechos".
"Felicito a los pontevedreses por ejercitar libremente su voto. También he llamado a Lores, a Anabel y a Raimundo para felicitarles por ganar las elecciones"
Rafa Domínguez tardó el salir. Mucho. Fue el más tardón de todos los candidatos en comparecer en público. No quería dar la cara hasta no estar seguro de que ninguno de los recuentos más rezagados podría tumbar ya su buen resultado.
"Felicito a los pontevedreses por ejercitar libremente su voto. También he llamado a Lores, a Anabel y a Raimundo para felicitarles por ganar las elecciones", fueron sus primeras palabras, tras los vítores, aplausos y felicitaciones de sus acólitos.
Agradeció el trabajo de la candidatura y aunque "en unos días haremos un análisis más profundo", recordó -en un claro reproche a los agoreros- que "hace tres meses las encuestas nos daban entre cuatro y cinco concejales, que hemos ido trabajando contrarreloj sin parar, extenuados, y que los pontevedreses nos hayan dado ese respaldo nos llena de satisfacción y estamos muy contentos", rubricó el ‘popular’.
