La nueva tarificación eléctrica y, principalmente, la brutal escalada del precio de la luz unida a otros problemas en el cobro de los recibos ha disparado el número de denuncias y consultas contra empresas energéticas en Pontevedra. En concreto, en la oficina que el Instituto Galego de Consuno e da Competencia (IGCC) tiene en la ciudad del Lérez, este tipo de quejas aumentaron un 156,28% en el último año.
De acuerdo con los datos facilitados por la Administración autonómica, en 2021 se registraron en este servicio 510 reclamaciones contra energéticas y 730 solicitudes de información, cuando el ejercicio anterior habían sido 199 y 387, respectivamente.
Facturas desproporcionadas y acumulación de mensualidades son algunas de las denuncias
Entre otras causas, los pontevedreses protestan tanto por facturas de la luz desproporcionadas como por retrasos injustificados en el cobro de los recibos con la consiguiente acumulación de mensualidades, y también preguntan por las posibilidades de modificar el tipo de tarifa para lidiar con los nuevos precios que van camino de convertir la electricidad en artículo de lujo. Asimismo, otro motivo para acudir tanto a las oficinas de las propias suministradoras como a la del IGCC es que a veces las compañías pasan la facturación estimada usando como referencia el consumo de períodos anteriores pero aplicando el precio actual del kilovatio hora y, en muchos casos, el total no se corresponde con la realidad porque el consumidor ya ha reducido su consumo y luego tiene que esperar la devolución.
Con este panorama, el sector energético fue el que experimentó un mayor incremento de quejas durante el último año en la capital del Lérez; pero también hay otros en los que las reclamaciones han ido en aumento. El segundo puesto del ranking en la oficina del IGCC lo ocupó la automoción, que en 2021 registró un 42,6% más de quejas, concretamente, 184 denuncias y 507 consultas.
Las quejas contra empresas de automoción y de textil crecieron un 43% y un 35%
La industria textil también acumuló un 36,7% más de reclamaciones; y las empresas de telecomunicaciones un 35% más, si bien estas últimas siguen siendo las que más denuncias reciben: fueron 920 quejas y 1.512 solicitudes de información en solo un año, unas cifras que evidencian los abusos que a menudo practican las firmas de telefonía y datos.
El sector sanitario mejora
En el lado contrario de la balanza se situó la salud y la estética, un área en la que las quejas de los pontevedreses bajaron un 30,4% con respecto a 2020, un descenso lógico teniendo en cuenta que la ciudadanía había recurrido mucho más al sector sanitario privado durante el año de explosión de la pandemia.
