El Concello de Pontevedra preparó un plan especial de tráfico previsto para el periodo de Navidad que se mantendrá hasta el 6 de enero. El objetivo de la medida es el de garantizar la movilidad en la ciudad, especialmente el funcionamiento del centro y la fluidez en la entrada y la salida, así como evitar los bloqueos por el aumento de tráfico.
La concelleira de Protección Cidadá, Eva Vilaverde, aseguró que con este plan "queremos garantir que a cidade funcione coa maior normalidade posible e que as persoas que visiten Pontevedra poidan disfrutar da cidade e da súa actividade festiva e comercial con tranquilidade e seguridade".
Este plan especial incluye tres elementos: la información a la ciudadanía, la señalización, y cortes puntuales en zonas sensibles que se realizarán únicamente en el caso de que sea necesario.
Los vehículos de urgencias, servicio público en general y los conducidos por personas de mobilidad reducida, están al margen de los cortes puntuales. En todo caso, se trata de una medida que se mantendrá el tiempo mínimo imprescindible para restablecer unos parámetros de fluidez aceptables en la circulación, aseguran desde el Concello.
ACTIVIDADES DIARIAS. El plan de tráfico opera con una división de la ciudad en tres partes. La primera está formada por el centro de la ciudad, en el que se espera un incremento considerable de afluencia de personas. La concelleira hizo hincapié en que se utilicen los aparcamientos de borde e invita a disfrutar de las actividades que hay durante todo el periodo de Navidad, no sólo los días más emblemáticos como el martes o este miércoles y el 5 de enero, para evitar aglomeraciones.
La segunda parte de la ciudad está formada por el llamado anillo primario, que incluye las calles y avenidas que dan acceso al centro de la ciudad: Xosé Malvar, Bos Aires, Uruguai, Corbaceiras, Manuel del Palacio, María Victoria Moreno, Estación, Eduardo Pondal e 12 de Novembro. En esta zona el objetivo es mantener la circulación en continuo movimiento, a un ritmo natural pero sin bloqueos.
La tercera parte está formada por el anillo secundario, que incluye vías en las que se recepciona el tráfico de entrada y salida de la ciudad y que funcionan a modo de circunvalación utilizando la autopista, la Parda, la carretera de Ourense para bajar por Monte Porreiro hasta la entrada de la autopista. En este plan se identifican zonas sensibles susceptibles de mayores aglomeraciones. Serían a Ponte das Correntes e a avenida de Uruguai, Barcelos, Eduardo Pondal e Uxío Novoneyra, Echegarai e Raíña Victoria, e a Estación do Tren. En estos puntos se actúa con el objetivo de evitar bloqueos a través de desvíos y cortes puntuales.
