Recta final en el juicio por estafar a aseguradoras con partes fraudulentos de accidentes

El historial de engaños se remontan a la denuncia del supuesto robo de un coche junto a la plaza de toros de Pontevedra
Audiencia Provincial de Pontevedra. DP
photo_camera Audiencia Provincial de Pontevedra. DP

La sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha retomado este martes el juicio por presunta estafa continuada a aseguradoras a través de partes fraudulentos de accidentes de tráfico.

La Fiscalía había alcanzado acuerdos de conformidad con 13 de las 20 personas acusadas en este macrojuicio, que aceptaron penas de entre tres meses y medio y 17 meses de prisión, por lo que la vista continúa con el resto de los procesados.

Esta segunda sesión ha estado centrada en los informes periciales y el testimonio de cuatro agentes de la Policía Local de Pontevedra cuyo informe en el año 2008 inició la investigación que dio lugar a este juicio, si bien todo había comenzado en las graves inundaciones de la comarca de O Salnés de dos años antes, 2006.

Los policías detallaron los supuestos fraudes que detectaron y señalaron que el origen de todo fue una denuncia de un conductor que aseguró que le habían robado el coche cuando lo tenía aparcado en el entorno de la plaza de toros pontevedresa. Sin embargo, los agentes comprobaron que era imposible que ese día estuviese allí el coche porque estaba prohibido estacionar, ya que había corridas de toros.

Otra circunstancia sospechosa era que por un vehículo se presentaron tres partes diferentes por tres accidentes y los tres tenían "exactamente los mismos daños". Además, otro coche figuraba como afectado por una granizada en la ciudad de Pontevedra, pero "en la época de la granizada estaba aparcado en Redondela", localidad en la que no cayó granizo.

Este martes, el fiscal modificó la solicitud de penas relativas a uno de los acusados, al tener en cuenta tres circunstancias atenuantes: dilaciones indebidas por el retraso del procedimiento –todo se remonta a una investigación de 2008–, analógica de confesión tardía porque reconoció los hechos y atenuante también de reparación del daño porque ha ingresado el dinero presuntamente estafado en la cuenta judicial.

Como resultado de estos cambios, el fiscal, Jesús Calles, pide que este acusado sea condenado a 14 meses y ocho días de prisión y al pago de una multa de 6 meses a 3 euros diarios.

El resto de las partes implicadas, tanto los abogados defensores como la acusación que ejercen las compañías aseguradoras Génesis, Zurich y Axa, elevaron a definitivas sus conclusiones iniciales.

La última sesión de este juicio ha quedado fijada para el 12 de diciembre con la exposición de los informes finales de las partes. 

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