La reforma integral de Loureiro Crespo se ampliará al barrio de O Castañal. Así lo confirmó este viernes el concejal de Obras, Demetrio Gómez Junquera, al presentar el diseño definitivo de la actuación, cuyo presupuesto pasará de 1.937.257 a 2.557.256 euros, lo que supone un 24% más de lo previsto inicialmente.
La modificación del proyecto responde, según el edil nacionalista, a la incorporación de las propuestas realizadas por vecinos y comerciantes de la zona. La principal novedad es que la obra contemplará la renovación de las redes de fecales y de abastecimiento en cinco calles cercanas a Loureiro Crespo: Ernesto Caballero, Forcarei, Amor Ruibal, Mestre Soutullo y Ramón Cabanillas. Todas ellas tendrán nuevos servicios subterráneos y nuevo asfaltado.
Estas intervenciones se incluirán en el pliego del contrato como mejoras de la reurbanización de Loureiro Crespo, por lo que serán las empresas que compitan por esta obra las que elijan cuáles incluyen en sus ofertas. El coste global de estas reformas anexas asciende, según los cálculos de los técnicos municipales, a 341.350 euros.
Los trabajos en Loureiro Crespo, que se pagarán con cargo al superávit municipal, están a punto de licitarse. Tienen un plazo de ejecución de doce meses y las obras comenzarán después del verano, tal y como aseguró Gómez Junquera.
La reforma de este vial se dividirá en tres áreas. La primera contempla la humanización completa de un tramo de 625 metros entre la rotonda de la avenida de Lugo y la intersección con la nueva Praza do Hospital. En esta zona se implantará un carril único de circulación y se ampliarán las aceras.
El segundo tramo comprende la avenida de Lugo y Casimiro Gómez (donde está el antiguo cuartel de la Guardia Civil, que se convertirá en una residencia de mayores privada). En este ámbito se prevé el ensanche de aceras y el estrechamiento de la calzada. A la altura de la glorieta de 12 de Noviembre se instalará una columna de iluminación y se plantarán dos liquidámbar de gran porte. En esta zona, la obra prevé un carril de asfaltado diferenciado. La acera del margen derecho tendrá baldosa y bordillo de granito. Y la de la parte derecha será de losa ‘vulcano’.
En el tercer tramo, entre Antón Fraguas y la Praza do Hospital, se prevé instalar una plataforma única, de modo que las aceras y la calzada estén al mismo nivel. El objetivo es ganar más espacio para los peatones.
Las mejoras. Las calles aledañas tendrán un tratamiento similar. El primer tramo de Ernesto Caballero y Ramón Cabanillas se separarán los tráficos peatonal y rodado. Se plantarán alcorques y el pavimento será similar al de Virxe do Camiño, de hormigón negro con bandas de piedra.
El segundo tramo de las calles Forcarei, Amor Ruibal y Ernesto Caballero se implantará la plataforma única. Los viandantes tendrán prioridad en esta zona, en la que se instalará nuevo mobiliario urbano.
En Mestre Soutullo se hará una actuación similar a la realizada en su día en la avenida de Lugo. Las baldosas serán parecidas y el carril de circulación se mantendrá igual.
La última intervención será en la Praza das Regas. Será la de menor calado y, por lo tanto, de menor presupuesto. Su coste será de 19.000 euros y consistirá en retoques en las esquinas de esta zona para facilitar el paso de coches. El objetivo es que esta plaza funcione como una especie de rotonda para mejorar la movilidad en el barrio.
El concejal de Obras, Demetrio Gómez Junquera, informó de que el jueves de la semana que viene se presentará el proyecto definitivo a los comerciantes y vecinos de Loureiro Crespo y O Castañal.
