Reto más que cumplido

La iniciativa solidaria 'Pontevedra x Guinea' multiplica por diez su objetivo inicial de un centenar de zapatillas, llegando a los 1.051 pares ► La exposición de todas las deportivas en la Praza da Peregrina y una pequeña carrera simbólica pusieron el colofón a esta campaña
Participantes en 'Pontevedra x Guinea' muestran con orgullo el resultado final de la campaña. RAFA FARIÑA
photo_camera Participantes en 'Pontevedra x Guinea' muestran con orgullo el resultado final de la campaña. RAFA FARIÑA

Para concluir una campaña solidaria más que exitosa, este sábado se desplegó en la Praza da Peregrina la muestra de todas las zapatillas recaudadas en Pontevedra con destino a Guinea-Bisáu. La iniciativa, que comenzó con unas expectativas en torno al centenar de deportivas, ha sobrepasado las previsiones más optimistas, desbordando todos los cálculos de sus promotores. "Ha sido brutal", reconocía durante esta jornada Álvaro Rodiño, uno de los tres jóvenes que a principios de enero lanzaron esta campaña.

Y es que Pontevedra x Guinea ha logrado recolectar más de un millar de zapatillas –concretamente, 1.051– para Silo Gambasse, una aldea de Guinea en la que conviven 850 niños, los principales destinatarios de este desafío.

Porque todo surgió en 2018, cuando un equipo de atletismo financió una pista deportiva cerca de la escuela. A la oenegé que lleva años colaborando con Gambasse se le ocurrió que el deporte podía ser un buen reclamo para que los chavales mostrasen más interés por los estudios, pues solo la mitad están escolarizados.

"A pesar de tener esta infraestructura, les hacían falta zapatillas, por lo tanto, la idea inicial era recoger el máximo material posible para enviar a este colegio, porque a raíz de esta pista aumenta la escolarización", explica Alberto Veiga, otro de los principales colaboradores.

Después de casi un mes de recogida, el resultado final se expuso este sábado en A Peregrina, donde los despistados o más rezagados aún tuvieron ocasión de realizar su aportación. De hecho, fueron varios los ciudadanos que, al ver el despliegue, acudieron a sus hogares y depositaron algún par.

Además de esta muestra, el acto incluía una pequeña carrera simbólica de alrededor de 3 kilómetros para poner el broche final a la primera campaña de Pontevedra x Guinea. El recorrido comenzó en A Peregrina y siguió por Rúa Real para dar una vuelta entera a las Marismas da Xunqueira de Alba y regresar al punto inicial. Una vez acabada la carrera, el siguiente paso fue empaquetar todas las zapatillas para poder enviarlas.

La empresa Tipsa ha colaborado en el transporte de este material hasta la sede de la oenegé en Barcelona, que será la encargada de hacer llegar a Guinea todas las deportivas. "Además, las nueve maletas en las que se transportará el material fueron costeadas por Cerámica Campo, Ape Galicia, Pontevedresa Group, Maquieira Agro y todos los profesores del colegio Calasancio", asegura Rodiño.

Agregó que "el envío de las zapatillas se dividirá en dos. Primero, se mandarán las nueve maletas con las más prioritarias, que son las de menor talla para los niños. El resto se transportará en un contenedor cedido por una empresa de Barcelona y llegará un poco más tarde, pero todo va a llegar, ya que la ONG acompañará a las maletas y al contenedor cuando se transporten".

Exposición para incentivar la donación

Personas colaborando con la campaña, este sábado. RAFA FARIÑA
Personas colaborando con la campaña, este sábado. RAFA FARIÑA

Además de las firmas colaboradoras, la organización contó con la ayuda de los locales de El dulce de leche y Miler Vintage para recoger las zapatillas. En este último se fueron exponiendo, a modo de incentivo. "Fue de gran ayuda porque nuestras zapatillas ocupaban la mitad de la tienda y era muy vistoso para la gente, la mayoría al preguntar por ellas y conocer la iniciativa se acercaba más tarde para colaborar con la causa", cuenta Víctor Riobó, otro de los coordinadores.

Los tres jóvenes que iniciaron esta campaña no se imaginaban los resultados que obtendrían y solo tienen palabras de agradecimiento en este tramo final hacia Pontevedra y todos sus ciudadanos. "Estamos asombrados con esta oleada de solidaridad. La iniciativa empezó muy poco a poco, pero una vez que la gente vio que había impulso, que la ciudad se volcaba y que era un proyecto solidario y viable, se superó con creces nuestras expectativas. Nuestra idea no era llenar la Praza da Peregrina y lo estamos consiguiendo", afirma Rodiño.

Alberto Veiga por su parte, asegura que nunca se esperaban tanta implicación por parte de la ciudad, ya que tenían unas expectativas iniciales de 50 o 60 pares y al final lograron una cifra inimaginable: "Estamos completamente felices con el resultado".

Con un objetivo más que cumplido y orgullosos de la solidaridad que ha demostrado la ciudad, los tres pontevedreses ya tienen los ojos fijados en el futuro con la idea clara de continuar con esta campaña.

Una idea clara y un futuro incierto

El objetivo del proyecto estaba claro: darle una segunda vida a aquellas zapatillas que acababan en el fondo del zapatero o, directamente, en la basura. La incógnita inicial era si se cumpliría, pero a medida que se fue desarrollando el éxito parecía asegurado.

"La ONG consideraba que, viendo la proporción de habitantes entre las ciudades, se recaudarían 15 o 20 pares. Nuestra idea inicial era alcanzar los 100 pares aproximadamente, desde luego nadie se imaginaba que íbamos a superar los mil ", asegura Rodiño repasando las expectativas iniciales.

La ONG de Barcelona organiza una carrera solidaria en el propio colegio de Guinea para celebrar la recogida. Por ello, el próximo sueño de Pontevedra x Guinea es viajar al pueblo y organizarla ellos.