Impulsar el recinto desde el punto de vista cultural, académico, paisajístico y turístico es el objetivo de la Xunta de Galicia, pues entre las posibilidades que incluirá la rehabilitación "rigorosa" del conjunto del Pazo de Lourizán de Pontevedra figura la dotacion de alojamiento y servicio de restauración.
"O rexurdimiento definitivo do Pazo de Lourizán empeza hoxe, 31 de xullo de 2023", manifestó este lunes el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, en un acto celebrado a pie de palacio en el que se oficializó la inversión de 18 millones de euros por parte del Ejecutivo autonómico y todo el plan de usos y actividades que ya se habían anunciado el pasado 13 de julio con su aprobación en el Consello da Xunta. Será el resurgimiento de unas instalaciones con un amplio valor histórico y ambiental.
Rueda fue el último en hablar en un acto en el que estuvieron presentes, entre otros, el presidente de la Deputación, Luis López; su vicepresidente, Rafa Domínguez; el conselleiro de Medio Rural, José González, y el director de Turismo de Galicia, Xosé Manuel Merelles, entre otras personalidades.
El concurso de ideas se licitará en septiembre para resolverlo en el primer semestre de 2024 y que ese año se inicien las obras
El presidente de la Xunta apuntó que, una vez concluido el traspaso de titularidad de la Deputación de Pontevedra al Gobierno autonómico, el objetivo es impulsar el complejo de Lourizán desde el punto de vista académico y cultural, pero también social, recreativo, paisajístico y turístico. Para eso, adelantó que se va a acometer la restauración "necesaria e rigorosa" del edificio principal del Pazo, así como de los itinerarios e instalaciones del jardín botánico, "un tesouro como hai poucos en España e Europa", ensalzó.
Además, se construirá una sala polivalente de madera en un nuevo inmueble de madera y se abre la posibilidad de albergar establecimientos de alojamiento turístico o restauración en parte de las instalaciones. En este sentido, el director de Turismo de Galicia aludió a la dotación de "máis ou menos 20 cuartos" en la primera planta, así como un área de restauración y cafetería, para que la ciudadanía "poida descubrir este tesouro", un edificio "cheo de historia e patrimonio". El pazo, según Merelles, se espera que pueda "xerar recursos propios para contribuir ao seu mantemento", algo que vinculó a la construcción de la mencionada sala polivalente de madera en un nuevo inmueble para sala de conferencias.

Un lugar de referencia
Rueda apuntó que el proyecto de la Xunta busca consolidar Lourizán como un centro de estudio, investigación y divulgación forestal. Tal y como explicó, el objetivo es que este sea un lugar de referencia para formarse en materia forestal y también un punto de encuentro entre todos los agentes públicos y privados de este ámbito. "Somos conscientes de que había que facer algo definitivo", más allá de los "remendos" de los últimos años, y para eso se destinarán "18 millóns, inicialmente", pues "é necesario atraer capital privado". Incluso agradeció "ao anterior goberno da Deputación", en concreto a "César Mosquera", expresidente nacionalista del organismo provincial, "que entendera que a propiedade debería ser da Xunta".
Hubo flores, pero ya en el canutazo posterior también mandó recado al anterior titular. "A negativa por sistema, dicir o que non se pode facer e poñer vetos, ao que nos leva é a que este edificio levara moitísimo tempo degradándose e sen ningunha utilidade. Estou seguro que a inmensa maioría da xente estará de acordo en que combinemos os usos, sempre sen perder a propiedade pública, para darlle unha vida que todos poidan aproveitar". Rueda precisó que en septiembre se licitará el concurso de ideas sobre los nuevos usos y actividades de Lourizán para que en el primer trimestre del año que viene ("ou semestre") comience la elaboración del proyecto elegido. "Se facemos as cousas ben, as obras deberían estar iniciadas en 2024", aseveró.
En el acto intervinieron también el director de la Axencia Galega da Industria Forestal (Medio Rural), Jacobo Aboal, quien señaló que esta nueva etapa supondrá "afondar" en su uso vinculado al sector forestal; y el arquitecto Manuel Rodríguez López, coordinador de la Fundación RIA (David Chipperfield), encargada de realizar el trabajo inicial para definir esos futuros usos del Pazo, que está incluido en el Catálogo de Patrimonio Cultural de Galicia y en el que en 1898 se firmó el Tratado de París cuando el inmueble era propiedad de Eugenio Montero Ríos.

"Ence non terá dereito sobre o edificio pero se fai unha achega ás arcas públicas..."
Preguntado sobre si Ence tendrá algún tipo de participación en el nuevo proyecto que acogerá el Pazo, Rueda admitió que la empresa "ten unha serie de compromisos coa Xunta", de aportación "dunha serie de investimentos onde a Xunta de Galicia dixera que tiña que estar. Polo tanto estaremos en conversas e se vemos que se poden achegar...". Esto, matizó, "non quere dicir, nin moito menos", que Ence vaya a tener "ningún dereito sobre este edificio, pero se fai unha serie de achegas ás arcas públicas e decidimos utilizalas...".
El presidente insistió en el compromiso de inversión de 18 millones de euros y "se parte poden ser os compromisos que ten Ence non creo que a ninguén lle moleste", porque "Ence aquí non tería ningún tipo de intervención na xestión nin no deseño".
Rueda insiste en que el conjunto no perderá la titularidad pública a pesar de su "uso diversificado"
También lanzó dos pullas al alcalde de Pontevedra, la primera por no asistir al acto pese a estar invitado y la segunda por criticar que la inversión era exigua. "Primeiro que nos deixe explicarlle o que queremos facer aquí. Dicir que non van chegar os cartos" sin saberlo "é bastante curioso". Insistió en que cuando la Xunta inicia un proyecto "ten os cartos para poñelo en marcha, non como algunhas iniciativas do Concello, que primeiro se anuncian e logo se busca o financiamento. A consecuencia é que pasan os meses e nada se fai. Aquí intentamos facer as cousas ben". Reiteró que siempre será "de titularidade pública" y afeó al anterior gobierno de la Deputación —pese al anterior agradecimiento público a Mosquera—, que "era experto en dicir o que non se podía facer", pero "dicir o que si costáballes bastante máis".
"Aquí dicímolo e empezamos a executalo. Sen perder a titularidade pública pero entendendo que hai que darlle un uso diversificado a este conxunto".