La presidenta de Portos de Galicia, Susana Lenguas, trasladó este martes a las confradías de Pontevedra la decisión del Gobierno central de no permitir más depósitos de áridos en el exterior de la ría de Arousa hasta la realización de un estudio de alternativas para su depósito, que hasta el momento el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico tenía autorizado con carácter permanente.
Esta decisión, comunicada a los patrones mayores de las cofradías que gestionan la lonja de Campelo y al presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Pontevedra, afecta al conjunto de los dragados previstos para todo el sur de Galicia, más concretamente para el proyecto de limpieza estipulado para el Lérez.
La decisión del Gobierno central conlleva una nueva tramitación para el depósito del material del dragado del río pontevedrés, puesto que esta limpieza no podrá realizarse hasta presentar el Ministerio un estudio de alternativas a un proceso que se venía utilizando desde 1998. De esta forma, condiciona los avances de la obra, que cuenta con un presupuesto inicial de 200.000 euros ya en ejecución para 2021. Además, durante los dos últimos años, Portos de Galicia ha invertido otros 200.000 euros en la tramitación ambiental realizada para cambiar el punto de depósito de la zona de Tambo previsto inicialmente por el ente público, al punto exterior de la ría de Arousa, más concretamente en la zona protegida de la isla de Sálvora.
Susana Lenguas asegura ahora que tratará de impulsar de manera urgente una comisión técnica con las Autoridades Portuarias, dependientes de Portos do Estado y afectadas por la decisión tomada, para proponer posibles alternativas para un nuevo punto de depósito.
Este trabajo es de carácter prioritario para el ente público autonímico, puesto que la autorización de un punto de depósito estable es una condición necesaria para la viabilidad de los proyectos de dragado de tda la franja costera desde Muros hacia el sur.
De esta manera, la presidenta de Portos de Galicia continuó aportando ideas y propuso también al sector la creación de una mesa de trabajo con las cofradías de pescadores a través de la Federación Gallega de Cofradías de Pescadores, las organizaciones de productores y otras entidades profesionales, junto con las administraciones implicadas para ahondar en las alternativas con el fin de agilizar el máximo la autorización del nuevo punto de depósito y hacerlo a su vez con garantías para lograr cuanto antes una nueva zona en la que ubicar el dragado del Lérez.
