El San Benitiño "máis milagreiro" y con más seguridad

Un circuito de entrada y salida evitará las aglomeraciones de los asistentes. Las mascarillas serán obligatorias en la iglesia
Asistentes a la misa de San Benitiño del año pasado. RAFA FARIÑA
photo_camera Asistentes a la misa de San Benitiño del año pasado. RAFA FARIÑA

Lérez afronta este año una celebración de San Benitiño atípica, marcada por la nueva normalidad. La principal consecuencia es que no saldrá la tradicional procesión con la imagen del santo, que tampoco podrán besar los feligreses. Otra de las innovaciones es que no se comulgará en la boca, solamente en la mano. Sí que asegura el párroco la entrega del tradicional aceite.

Las medidas comenzaron ya este jueves con el inicio de la novena. No se puede superar el 75% del aforo de la iglesia, por lo que se ofrecen dos misas diarias con el objetivo de evitar aglomeraciones. Además, el uso de la mascarilla es obligatorio y también es necesario desinfectar las manos antes de entrar en la iglesia.

El párroco, Crisanto Rial, señala que también se ha creado un sistema de entrada y salida a la iglesia para evitar, lo máximo posible, el contacto entre los asistentes. "La entrada será por la puerta principal de uno en uno. Para la salida, los sentados en los bancos de la fila izquierda y en la tribuna lo harán por la puerta principal mientras que la puerta lateral queda reservada solamente para la salida de aquellos sentados en los bancos de la fila derecha", explicó el sacerdote.

Crisanto Rial apunta que este año será más difícil que ningún otro, no solo por la ejecución de las nuevas medidas, sino porque tampoco contarán con la ayuda de Protección Civil para organizar la entrada y salida de los fieles. "Esta decisión ha producido malestar entre los feligreses. No entienden que otros años hayan participado y este no, cuando su ayuda es más necesaria", aclara.

El párroco explica que el dispositivo de seguridad se mantendrá en las inmediaciones, por si ocurriera algún desmayo o inciendia pero que no podrán acceder a la iglesia al ser considerada un recinto privado. "Respeto y agradezco su actuación, pero me resulta extraño que tras muchos años en las puertas de la iglesia descubran ahora que el templo es un recinto privado. Ciertamente es privado, pero de uso público", matiza.

El sábado 11, el horario de misas será de 07.00 a 13.00 horas en el turno de la mañana. Por la tarde comenzarán a las 17.00 y la última se oficiará a las 20.00 horas. "Las misas serán breves, ya que tendremos que ventilar y desinfectar los bancos después de cada oficio", señala Crisanto Rial. Además, por cada celebración el aforo esta reducido a cien personas, que deben colocarse en los bancos manteniendo la distancia de seguridad y siempre con mascarilla.

San Benitiño de Lérez, que ya sufrió los primeros efectos de la pandemia de coronavirus con la cancelación de su celebración de invierno, se ve ahora obligado a incorporar nuevas medidas para asegurar el bienestar de los asistentes.

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