Sanidade eleva en un millón de euros las expropiaciones del Gran Montecelo

Los afectados siguen considerando irrisorias las indemnizaciones y recurrirán al Contencioso
Algunos de los damnificados ante sus negocios y propiedades. D. F.
photo_camera Algunos de los damnificados ante sus negocios y propiedades. D. F.

La resolución definitiva del proceso de expropiaciones para el Gran Montecelo, publicada el pasado martes en el Diario Oficial de Galicia, ha supuesto un incremento de más de un millón de euros en las tasaciones. Una cifra que desde la Xunta consideran "moi importante" mientras que los afectados continúan diciendo que "es irrisoria, porque el doble de algo ridículo sigue siendo ridículo".

El procedimiento afecta a cinco viviendas, cinco negocios y 15 parcelas ubicadas en las inmediaciones del actual complejo sanitario. Sus titulares se mostraron contrarios, desde el primer momento, a la valoración inicial que habían efectuado los técnicos autonómicos, "muy por debajo de los auténticos valores de mercado".

Gracias a la mediación del presidente local del PP, Rafa Domínguez, se gestionó a finales de agosto una reunión en Santiago a la que asistieron, por una parte, los directores xerais de Recursos Económicos del Sergas y de la Axencia Galega de Infraestruturas, por parte de la Xunta, y por otra, una representación de los vecinos. Estos manifestaron su discrepancia con las valoraciones hechas, especialmente en lo relativo a las viviendas y a algunos negocios.

El procedimiento afecta a cinco viviendas, cinco negocios y 15 parcelas ubicadas en las inmediaciones del actual complejo sanitario

Con respecto a las primeras, argumentaron que las tomadas como referencia para ponerle precio a las suyas tenían calidades interiores de menor nivel y, en relación con los comercios, alegaban una rentabilidad mayor.

SEGUNDA TASACIÓN. A consecuencia de aquella reunión, los técnicos responsables de la expropiación visitaron la zona para efectuar nuevas mediciones y comprobar lo expuesto por los afectados.

Según explicó este jueves Sanidade de forma muy escueta, "consideráronse dúas testemuñas novas (vivendas ou leiras similares á venda na zona para proceder a realizar unha valoración mais axustada), coas que estiveron de acordo os veciños. Afecta, na súa maioría, a propietarios de vivendas e negocios. O importe incrementouse nun total de 1.056.527,42 euros".

De este modo, a falta de una más que previsible intervención del Jurado de Expropiaciones —según lo manifestado por los afectados—, la tasación definitiva de las expropiaciones suma 3.650.014,45 euros.

La tasación definitiva de las expropiaciones suma 3.650.014,54 euros

En relación con las fincas rústicas, se revisaron varios casos de expropiación parcial, pues sus propietarios alegaban que se quedaban con una parcela inaprovechable para ningún tipo de explotación. En los casos en los que se consideró razonable este alegato, se decidió reconsiderar el valor inicial y proponer una expropiación entera. 

Meli Aboal, portavoz de los afectados, se mostró este jueves indignada "porque no fue una renegociación de los importes, sino una corrección de los errores que ellos mimos habían cometido". Adelantó que irán "a por todas" y que el siguiente paso será presentar un recurso contencioso-administrativo.

"Que nos dejen comer el turrón en nuestras casas"
El conselleiro de Sanidade apuntó el miércoles, durante un acto electoral ante colectivos sanitarios de la ciudad, que una vez resuelto el apartado de las expropiaciones, las obras se licitarían antes de fin de año para que pudieran comenzaron en 2020.

Los afectados desconfiaron ayer de esas previsiones tan optimistas, "porque estamos casi a mediados de noviembre y no hay tiempo para esos plazos".

No obstante, cabe recordar que una vez aprobada la urgente ocupación de los terrenos, el Sergas (que será el nuevo titular de los mismos) podría poner en marcha las excavadoras solo 15 días después de abonadas las compensaciones.

"Esperemos que sean personas que nos dejen tomar el turrón en nuestras casas", apuntaban este jueves las hermanas Eva y Meli Aboal, dos de las principales afectadas, por cuanto el proyecto se lleva por delante sus viviendas y sus negocios. En cualquier caso, reiteraron su intención de llegar "al Jurado de Expropiaciones y al último resorte que nos permita la Justicia".

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