La pandemia de la covid-19 ha cambiado la perspectiva a corto plazo de muchas familias sobre el lugar de residencia y, en especial la llegada de la segunda oleada, está haciendo que esa nueva tendencia se materialice en un incremento en los padrones municipales de los concellos situados en la periferia de las grandes urbes, o en los que poseen entornos más rurales.
La comarca de Pontevedra y su ría no son una excepción a esa corriente que ya había avanzado el sector inmobiliario cuando hizo una primera lectura sobre las consecuencias que iba a tener el primer confinamiento de la población, con el estado de alarma entre marzo y mayo.
CÉSAR POZA
Alcalde de Vilaboa"Trátase de xente que estaba empadroada noutro concello e vivía en Vilaboa. Necesitan facelo para poder desplazarse"
La ciudadanía prefiere las casas y los espacios abiertos y, como consecuencia de ello, los padrones municipales de los concellos de la periferia están creciendo. Con la llegada de las primeras medidas restrictivas en Pontevedra (el cierre perimetral con Poio y Marín anunciado el 30 de octubre) y el temor a un nuevo confinamiento domiciliario, este fenómeno se ha disparado.
La tónica se mantiene en todos los concellos del área y con casos muy destacados en aquellos en donde la bolsa de segundas residencias es grande. Sanxenxo ha registrado en los diez primeros días del mes 85 altas en el padrón. La oficina municipal detecta un repunte muy notable, que el viernes, dejó a 17 nuevos más en una mañana.
En O Grove, el alcalde, José Cacabelos, explica que el aumento de filiaciones ya se ha pronunciado "no periodo entre maio e setembro, outubro". El regidor indica que "atopamos que moitos dos que tiñan segunda residencia quixeron quedar e que se empadroaron, outros que proveñen de zonas con teletraballo, como Madrid, decidiron que non voltaban e tiveron que empadroarse en verán para poder mandar aos cativos ao colexio. Tamén vemos como a partir de setembro comezamos a recibir propostas e peticións de zonas que tradicionalmente quedan baleiras. Cousas como máis contenedores, un punto de luz, melloras puntuais que nos indican que hai veciñanza e que requiren da posta a punto dos servizos elementais", indica el regidor, que ha detectado este fenómeno en Pedras Negras y A Toxa, especialmente.
En Poio calculan que ha crecido en unas 50 personas con respecto al periodo de los últimos meses del año anterior.
90 AL MES. Entre junio y lo que va noviembre acumulan 475 nuevos poienses. No es momento (no ha acabado el año) de restar las bajas, que también las hay, pero la media demás de 90 altas al mes es inédita, incluso en este concello que lleva años seguidos con un marcado crecimiento poblacional. Estas nuevas altas se concentran en zonas en donde hay grandes bolsas de residencias vacacionales, como Raxó.
JORGE CUBELA
Alcalde de Cercedo-Cotobade"Detectamos clarísimamente un crecemento no padrón de habitantes nas últimas semanas. Levamos 26 altas no que vai de mes"
La situación tampoco pasa desapercibida en los pequeños concellos. En Cerdedo-Cotobade, el alcalde, Jorge Cubela, indica que los empadronamientos están crecendo "clarísimamente". En lo que va de mes de noviembre, el Concello ha incorporado a 26 vecinos nuevos. La cifra es más positiva, si cabe, en el contexto de estos municipios, que llevan años luchando contra la pérdida de población. A Lama ha registrado siete empadronamientos en 15 días. Se trata de vecinos procedentes de México y Madrid, que de algún modo confirman el nuevo papel de "refugio seguro" de los municipios rurales. En Vilaboa, el alcalde confirma que el incremento ha llegado a sumar 30 altas en noviembre. "A media é de catro ou cinco empadroamentos ao día", pero no en segundas residencias, sino en viviendas habituales.
XOSÉ M. FERNÁNDEZ ABRALES
Alcalde de Barro"Máis destacado ca os empadroamentos parécenos o repunte das licencias de rehabilitación. Moita xente amosa interese por instalarse en Barro"
En Barro, Xosé Manuel Fernández Abraldes señala que "non só medran os empadroamentos, senón tamén as licenzas de reforma ou restauración. Estes meses vendeuse moita vivenda nova ou baleira e vemos que hai interese polo parque inmobiliario".
En Soutomaior también han dado cuenta de este crecimiento y en Ponte Caldelas, más que empadronados, notan que todas o casi todas las segundas residencias mantienen a sus habitantes del verano.
