Segunda vida de los laboratorios de drogas

El Servicio de Gestión de Bienes de la Fundación Galega saca a subasta todos los útiles incautados por la Udyco de Pontevedra en sus últimos operativos ► Empresas y organismos públicos pueden reutilizarlo ► Se vigilará que no lo recompren los narcos
Material de ventilación que forma parte del lote incautado por la Udyco. DP
photo_camera Material de ventilación que forma parte del lote incautado por la Udyco. DP

La Fundación Galega Contra o Narcotráfico (FGCN) sigue en su lucha por devolver a la sociedad, en la medida de lo posible, el producto de los bienes adquiridos ilícitamente con quienes comercian con sustancias estupefacientes. Uno de los mecanismos más importantes para conseguir esos objetivos es el Servicio de Gestión de Bienes Decomisados, coordinado por la propia entidad con la financiación de la Xunta de Galicia y el apoyo de las autoridades judiciales, la Fiscalía Antidroga de Pontevedra y el colegio de procuradores de A Coruña.

En el marco de esta iniciativa, la FGCN ha sacado a subasta todos los artilugios que fueron decomisados en la más reciente operación de la Udyco de la Policía Nacional de la ciudad del Lérez, que se saldó con la desarticulación de una célula de la Mafia Albanesa de la marihuana aliada con traficantes locales que disponía de naves industriales para el cultivo de la planta del cannabis en Pereiro de Aguiar (Ourense) y en Mourente, un operativo de cuyos resultados dio cuenta este periódico a finales de 2022.

Pocas semanas después de aquello, las lámparas, los ventiladores, los generadores y todo el material que servía a los traficantes para hacer crecer la marihuana tendrá una segunda vida mediante el proceso de subasta o, en último caso, incluso a través de una donación a una entidad pública o con fines sociales que les dé una segunda vida.

Con un precio de salida de 4.280 euros, el jueves concluye el plazo para pujar por un equipo útil para empresas del sector agrónomo, que podrían adquirirlo a precio de saldo, pues está valorado en más de 10.000 euros tras su oportuno peritaje. Las entidades que coordinan el plan estarán atentas para evitar que sean los propios narcotraficantes los que adquieran los utensilios, con el fin de evitar que, como ya ha ocurrido en el caso de algunas embarcaciones, vuelvan a ser utilizadas para el ilícito negocio.

Además, en el caso de que el plazo finalice sin pujas, se abrirá la posibilidad de que entidades sociales o incluso organismos públicos puedan acceder a un material que, por ejemplo, ya opera en las piscinas de Vilagarcía de Arousa, que utilizan ventiladores que en su día fueron incautados en otro laboratorio para beneficio de toda la ciudadanía. Allí ya tienen una segunda vida.