CADA VEZ son más personas las que se suman al vegetarianismo y veganismo en Galicia. Según datos de un estudio encargado por la Fundación Franz Weber y la Asociación Animalista Libera, en los últimos diez años el número de personas con una alimentación basada en vegetales, incluyendo a vegetarianos y veganos, ha aumentado en un 6000%. La encuesta, realizada a un millar de gallegos, indica que el 8% no come carne, de modo que Galicia queda por debajo en la media estatal que se sitúa en un 10%. Complementariamente, las asociaciones declaran que en la comunidad gallega estas personas podrían llegar a sumar las 200.000, una cifra relativamente baja debido al gran peso que presentan la industria cárnica o láctea en la región.
El crecimiento del número de personas que no comen carne en los últimos años también se nota en Pontevedra. Existe un grupo de Facebook, común en casi todas las ciudades, llamado "Veganos y vegetarianos de Pontevedra" que cuenta con casi 1.000 miembros desde su creación hace siete años aunque, en proporción, el número de participantes es menor que en otras ciudades. En el se comparten recetas, consejos o se recomiendan restaurantes.
Cada vez es más común encontrarse menús que incluyen opciones vegetarianas o veganas y, aunque en la Boa Vila no existe ningún restaurante completamente especializado en la cocina sin procedencia animal, sí se puede disfrutar de platos exclusivamente vegetales más allá de una ensalada.
Las asociaciones de veganos aseguran que en la comunidad gallega estas personas podrían llegar a sumar 200.000
En la ciudad hay más de una docena de locales en los que se puede consumir sin probar cárnicos ni lácteos. Son restaurantes que ofrecen ambas opciones. Por ejemplo O bo xantar, que abría sus puertas en plena pandemia de coronavirus, con el veganismo como sello de identidad. Entre las opciones de menú pueden escogerse platos como tortilla sin huevo, croquetas de champiñones, seitán vegano o incluso zorza vegana. Según cuentan los dueños, existe un cliché con las personas veganas y una falsa creencia de que no existe variedad en su dieta, sin embargo animan a los clientes a experimentar.
Otro sitio que cuenta con una amplia carta vegetal en su menú es Barallocas, en la calle Don Gonzalo. Cuentan que la idea surgió "para que gente que come carne pueda compartir mesa con gente que no, y todo el mundo quede integrado y comer el mismo tipo de comida con diferentes ingredientes". En este caso, se pueden encontrar en el menú opciones modernas como hamburguesas, tanto de carne como de lentejas, lo mismo ocurre con las croquetas o las patatas, que vienen acompañadas de salsas para ambas opciones.
Desde ambos restaurantes, afirman que es un mercado en expansión en Pontevedra, existe poca competencia porque aún son pocos los locales que se animan a transformar su menú. Junto a estos, sí lo hacen algunos como Padal da Santiña, Alcrique, DüKela, Cre Cotte o incluso heladerías como Vía Veneto.
DIARIO EN LA CALLE. ¿Por qué eligen esta opción?
Julia Baena. Vegetariana ► "Tomé la decisión de hacerme vegetariana porque me empecé a informar del impacto climático que tenía, y vi que era insostenible. No podía mirar para otro lado. Además, es un consumo más ético porque no dejas que la industria se lucre de los animales y las personas. Sumado a esto, la dieta es mucho más saludable. Son muchas las ventajas que ofrece esta alternativa frente a que, a lo mejor, me guste comer jamón".
Sonia Vidal. Vegana ► "Soy vegana desde hace tres meses, antes era vegetariana. Pero desde un principio mi meta era ser vegana, porque la industria láctea no es mucho menos cruel que un matadero. Además, el veganismo es un estilo de vida, más allá de la alimentación. Frente a comprar en un supermercado, procuras apoyar al pequeño comercio, el producto local o tratar de que las prendas y los cosméticos estén libres de maltrato animal".
Lucía Vázquez. Vegana/Vegetariana ► "Era vegana pero cambiei a vexetariana porque a cociña era máis sinxela, aínda que teño planeado volver ao veganismo. No supermercado é facil atopar alimentos aptos se es vexetariano, cando es vegano custa máis, ademáis eu tomaba a vitamina B-12 que recomendan e tiña moi en conta a mestura dos alimentos para medir ben a cantidade de nutrintes que inxería. Tendo isto en conta, é posible comer moi variado".
Laura Casal. Vegetariana ► "Son vexetariana en transición ao veganismo. Existe un estigma social con nós que nace dunha falta de información ou de escoitar informacións que non son veraces. Ademáis, é común recibir comentarios negativos por parte de doutores e nutricionistas que non están formados niso en específico. A realidade é que moita xente pensa que é algo caro ou que afecta á saúde. A información veraz é clave para desmentir estes bulos".