La provincia de Pontevedra acogía en junio a 12.229 trabajadores llegados de otros países, una subida del 11.35% con respecto al mismo mes de 2017. Así se desprende del último Informe de Afiliaciones de Extranjeros a la Seguridad Social. Este dato ubica a la provincia con la segunda con más afiliados extranjeros, solo superada por la de A Coruña. Comparado con mayo de este año, la subida es del 2,62%, por encima de la media gallega y de la española.
Se trata, además, de la primera vez que se supera la barrera de los 12.000 desde que lo hiciera en junio de 2008, cuando la media de afiliados a la seguridad social eran 12.319.
De estos trabajadores, 5,747 (el 37,4%) proceden de otros países de la Unión Europea, mientras que el resto, 6.552, de estados extracomunitarios. En el caso de los primeros se trata de la provincia gallega preferida para establecerse y trabajar, pues supera a las otras tres con un 37,2% del total de la comunidad autónoma, mientras que en número de extracomunitarios está en la segunda posición, solo superada por A Coruña.
En total, en junio se firmaron 2.233 nuevos contratos a extranjeros, de los cuales 160 fueron indefinidos iniciales, 65 convertidos en indefinidos y 2.008 temporales, lo que demuestra la inestabilidad laboral en la que se encuentran habitualmente.
En cuanto al perfil de los trabajadores extranjeros de la provincia, la mayor parte están afiliados a la Seguridad Social en el Régimen General, 8.359, mientras que 2.329 son autónomos, 970 pertenecen al Sistema Especial del Hogar, 521 al del mar y los menos, 120, al Sistema Especial Agrario. La influencia de la costa en los empleos de la provincia, tanto para personas españolas como para las llegadas de otros países, se ve clara aquí, pues es la provincia gallega en la que más trabajadores de otros países están dados de alta en este sector.
En cuanto a los nuevos contratos, por edades la gran mayoría, 1.389, tenían entre 25 y 45 años y solo 250 menos de 25. Además, el grueso de contrataciones se produjo en el sector servicios donde el número de empleados extranjeros aumentó en 1.722, una tendencia que coincide con la que las personas de nacionalidad española. Muy lejos está la industria, con 278 nuevos trabajadores, la construcción, 142, y la agricultura, 91.
Además, de las 12.299 personas que trabajaban en junio en la provincia de Pontevedra que no tenían la nacionalidad española, 2.284 eran hombres y 5.015 mujeres. Esta diferencia entre sexos es aún mayor entre los ciudadanos de la Unión Europea, pues son 3.907 hombres frente a 1.804.
En total, en Galicia hay 35.361 trabajadores y trabajadoras llegados de otros países, lo que supone que en el último año se afiliaron a la Seguridad Social 3.685. De ellos, 15.377 procedían de la Unión Europea y 19.984 de países extracomunitarios. Además, se firmaron 6.220 nuevos contratos y la tendencia fue similar a la de la provincia de Pontevedra, con la mayoría de ellos, 4.752, concentrados en el sector servicios.
Sin embargo, se trata de una de las comunidades autónomas menos atractivas para que los extranjeros se establezcan en ella, pues solo Asturias, Cantabria, La Rioja y Navarra cuentan con menos afiliados a la Seguridad Social llegados de otros países.
