El fin de los triángulos tiene sello pontevedrés

Una luz para salvar vidas

Dos guardias civiles en excedencia de la Comandancia de Pontevedra han obtenido el visto bueno del Gobierno para homologar un nuevo sistema de señalización de averías y accidentes que mejora en todos los aspectos al anterior y aporta mayor seguridad vial

Los padres de HelpFlash posan con su innovador artilugio
photo_camera Los padres de HelpFlash posan con su innovador artilugio

Jorge Costas y Jorge Torres son dos miembros de la Guardia Civil de Pontevedra que han optado por la excedencia para apostar por el emprendimiento. Sin embargo, su empresa no es una Start Up al uso. HelpFlash, un invento que revolucionará la seguridad vial en España, es ya una realidad. La Dirección General de Tráfico hizo suyos los argumentos presentados por los dueños de la idea, que no es más que un artilugio que viene a sustituir a los arcaicos triángulos de señalización de accidentes por un dispositivo luminoso para poder indicar la presencia del turismo sin necesidad de apearse del mismo, visible a un kilómetro de distancia e incluso dotado de un sistema de inteligencia artificial que ubica el vehículo que está en problemas para su localización por parte de los servicios de emergencias. El invento, que llevaba algunos meses en el horno, iba a ser aprobado por el gobierno popular, pero el cambio en Moncloa hizo que no fuese hasta el 1 de agosto pasado cuando fuese homologado, por lo que su empleo es totalmente legal desde entonces en las carreteras españolas. El siguiente paso, que tendrá lugar en los próximos meses, será el cambio total del sistema, que obligará a todos los turismos a contar con un dispositivo mucho más práctico y seguro que los ya obsoletos triángulos.

LA IDEA. "El proyecto nació de dos guardias civiles que se percataron de que todos los vehículos de emergencias, tales como ambulancias, grúas o fuerzas de seguridad, disponían de luces especiales, mientras que los particulares no contaban con ellas. Vimos que los triángulos se habían quedado totalmente obsoletos y que estaban provocando muertes, especialmente en autopistas y en autovías". Jorge Costas, uno de los padres de la idea, explica así el origen del invento. "En su día se implantó la tercera luz de freno", explica, "y ahora, con la tecnología de la que se dispone, había que crear un dispositivo con tecnología LED y luces lo suficientemente potentes como para ser detectadas a un kilómetro de distancia". Así, y con el apoyo del Centro Tecnológico del Automóvil de Galicia (con sede en O Porriño) nació HelpFlash.

Costas recuerda que "dentro de la Guardia Civil ya teníamos inquietud emprendedora, por eso decidimos salir a la calle y apostar por ello". La DGT anunció recientemente que en lo que va de han fallecido ocho personas en accidentes en carretera provocados por una mala señalización de otros siniestros, un dato que refuerza la necesidad de apostar por un cambio que ya se ha puesto en marcha y que en breve plazo se establecerá como la única opción legal en España.

ASÍ FUNCIONA. El modo de funcionamiento de HelpFlash es sencillo. En el caso de una parada por avería o accidente del vehículo, basta con colocarlo sobre el techo del vehículo. El artilugio entra en funcionamiento en cuanto entra en contacto con la chapa gracias a su sistema de activación magnética, de un modo similar al de las sirenas portátiles de las que disponen los vehículos policiales camuflados. Las primeras unidades cuentan con una autonomía de dos horas y media, tiempo suficiente para la presencia de los medios de emergencia necesarios.

"Se trata, además, de un dispositivo de especial interés para colectivos vulnerables al volante como las personas mayores, embarazadas o personas con movilidad reducida, así como para los motoristas, que no disponen de sistema alguno de señalización".

La Dirección General de Tráfico avaló el invento pontevedrés en el Boletín Oficial del Estado del pasado 31 de julio. A partir del día siguiente, como se ha dicho, HelpFlash quedó oficialmente homologado.

El nuevo texto legal señala que "la parada de un vehículo en la vía por causa de avería o accidente supone un grave riesgo para la circulación. El accidente por alcance en la vía de vehículos que se encuentran en estas condiciones es muy común y con un resultado en muchos casos de graves lesiones o de fallecimiento de los ocupantes del vehículo. A efectos de evitar estas consecuencias, actualmente el anexo XI del Reglamento General de Vehículos contempla el empleo de la señal V-16, de dispositivo de preseñalización de peligro, (los conocidos triángulos) para identificar a aquel vehículo que haya quedado inmovilizado en la calzada o cuyo cargamento se ha caído sobre la misma. Sin embargo, y pese a la efectividad de su función, su colocación implica un riesgo añadido en determinadas vías con tráfico elevado". Por ello, el BOE añade que "para ofrecer una mayor protección al conductor y al resto de los ocupantes del vehículo que esté parado en la vía por avería o accidente mientras esperan la llegada del servicio de auxilio en carretera, se permite la colocación en el exterior del vehículo de un dispositivo luminoso de color amarillo auto, de alimentación autónoma, alta visibilidad y que quede estable sobre una superficie plana. Se trata de admitir la utilización de un dispositivo de fácil manejo que solucione el problema de la falta de visibilidad real y efectiva del vehículo".

Este nuevo dispositivo luminoso se incluye en el anexo XI del Reglamento General de Vehículos, dentro de la señal V-16, dispositivo de preseñalización de peligro, como un elemento opcional, junto al ya existente triángulo de peligro, que sigue siendo obligatorio. Es el paso previo a su implantación definitiva que, como se ha dicho, será una realidad en próximas fechas como sustituto de los famosos triángulos.

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