Unidades de la Brilat ya están en Líbano para inspeccionar el terreno

La base aérea de Torrejón de Ardoz fue este martes el escenario de la primera salida de efectivos militares de la Brigada Galicia VII (Brilat) con destino a la base Miguel de Cervantes, en Líbano, que será el cuartel general de cientos de los soldados de la unidad pontevedresa a partir del mes de noviembre. La delegación, liderada por el jefe de la Brilat, el general Antonio Romero Losada, partió en un avión del Ejército del Aire hacia Oriente Medio después de un breve encuentro con las autoridades de la citada base aérea madrileña.

Los efectivos que viajaron el martes y que ya se hallan en Líbano tienen como cometido el reconocimiento completo de la zona en la que se va a desplegar la Brilat dentro de ocho semanas, un paso necesario para realizar con precisión los últimos días de adiestramiento específico.

MANIOBRAS. En relación con los últimos entrenamientos de cara a la citada misión, fuentes de la Brilat informaron de la realización de tres ejercicios combinados en distintos emplazamientos en las últimas horas, todos ellos enfocados a la citada misión en territorio libanés. Dos de ellos se desarrollaron en territorio asturiano, de cuya subsede partirán gran parte de los soldados del citado despliegue. En concreto, los militares efectuaron prácticas de lanzamiento de granadas en las instalaciones de la base Cabo Noval, por una parte, y prácticas con vehículos blindados todoterreno en la zona de Villaviciosa.

Otras unidades se desplazaron al campo de maniobras del monte Teleno, en la provincia de León, donde aprovecharon para efectuar ejercicios en campo abierto.

En las próximas semanas, los soldados que han sido seleccionados para la misión seguirán con la fase final de su puesta a punto.

LA MISIÓN. El subdelegado de Defensa, Ángel de Miguel Campos, explicó semanas atrás a este periódico que "nuestras unidades realizan diariamente patrullas a pie, observatorios y checkpoints para monitorizar permanentemente la línea de separación entre países (Líbano e Israel), la Línea Azul".

De Miguel relató que el Ejército español está al frente de uno de los dos contingentes multinacionales desplegados al Sur del río Litani, en una zona considerada libre de armas amparada por las Naciones Unidas. Los cascos azules, bajo cuyo paraguas se encontrarán los soldados de la Brilat, tienen entre sus cometidos vigilar el cese de las hostilidades entre los paramilitares de Hezbolá e Israel, así como asistir a las Fuerzas Armadas de Líbano en el Sur del país a lo largo de la mencionada Blue Line. Además, deben garantizar el acceso humanitario a las poblaciones civiles y el regreso voluntario y seguro de los desplazados.

Dos ejercicios de tiro, uno desde un punto fijo y otro en campo abierto, efectuados por la Brilat. BRILAT OC
 

El grueso del contingente del acuartelamiento pontevedrés se instalará en la base Miguel de Cervantes, cerca de la localidad de Marjayun, aunque también habrá efectivos en Naqoura.

Además de la misión puramente militar, el subdelegado incidió en la importancia de las actividades que los soldados españoles desarrollan con la población local, entre las que destacan las escuelas deportivas para niños o las ayudas a profesores y alumnos con necesidades especiales.

Además, en Líbano es importante la implementación del plan de atención sanitaria en apoyo a la población civil, en virtud del cual un equipo médico recorre los pueblos ofreciendo sus servicios a todos aquellos que lo necesiten, de acuerdo con los planes establecidos.

Por otra parte, un segundo contingente de la Brilat se desplegará en las mismas fechas (a partir del mes de noviembre) en un segundo escenario de conflicto: Mali.

En este caso, el cometido de los militares pontevedreses será la instrucción de las Fuerzas Armadas del país africano. Paralelamente, cientos de soldados tendrán el objetivo de aportar seguridad a las áreas en las que desarrolle el adiestramiento.