Vecinos de Verducido crean una señalización especial para que los carteros no se pierdan

Las modernas tecnologías no han conseguido desbancar al tradicional método de comunicación escrito, el de la carta. De hecho, las distintas administraciones siguen empleando este método para remitir a los contribuyentes las notificaciones oficiales en las que les informan de sus obligaciones tributarias. La red postal pública, que también incluye entre sus servicios la entrega de paquetes a domicilio, tiene dificultades para funcionar de forma óptima en la parroquia pontevedresa de Verducido porque las viviendas no están rotuladas con sus respectivos números ni identificadas con los nombres de los siete núcleos en los que se divide esta zona del rural.

Hace dos años que los vecinos comenzaron a notar que la correspondencia no les llegaba con la frecuencia habitual. La jubilación del cartero que conocía al dedillo los distintos lugares de la parroquia y a los residentes hizo que las misivas dejaran de ir a los buzones de las 300 viviendas de Verducido en las que viven en torno a un millar de personas. La asociación vecinal Outeiro do Castro se ha puesto manos a la obra para subsanar esta deficiencia, de la que no responsabiliza a Correos sino a la imperfecta rotulación de los inmuebles, una actuación que es competencia de la Administración local.

"El rural lleva años sin rotularse", denuncia el presidente del colectivo, Marcos Rey, que subraya que "hay vecinos que no saben cuál es el número de su vivienda porque la última vez que se rotuló fue hace muchos años, con una pintura negra que acabó borrándose".

En vista de las dificultades con las que se encuentran los carteros para localizar el número de la vivienda y diferenciar los distintos núcleos, la agrupación Outeiro do Castro aprobó en su última asamblea la puesta en marcha de un sistema identificativo basado en carteles de siete colores, uno por cada lugar de la parroquia (A Abelleira, Bordel, Covadáspera, O Gavián, O Outeiriño, Rosende e Vilariño) con el número de cada vivienda y el nombre de cada núcleo.

La realización de este proyecto, que Outeiro do Castro tiene previsto desarrollar en este primer trimestre de 2017, supondrá una inversión de 500 euros. "Colocaremos en el atrio de la iglesia el mapa de Verducido, con cada zona de su correspondiente color, para que el cartero sepa a dónde tiene que ir a depositar la correspondencia", explica Marcos Rey.

"Se trata de una actuación urgente, por lo que incluso contamos con la colaboración muy activa del responsable del departamento del rural de Correos, que nos ha dado ideas y nos enfocó la solución", destaca el dirigente vecinal.

Solventar la problemática con la correspondencia fue una de las primeras actuaciones que abordó la actual junta directiva de la asociación Outeiro do Castro al hacerse cargo de las riendas de la entidad, que retomó su actividad hace dos años, después de haber estado un tiempo aletargada.