Los datos son demoledores: uno de cada tres accidentes con víctimas mortales están asociados a una distracción al volante. Y en el 90% de los casos el manejo del móvil es el principal desencadenante de la tragedia.
Tal y como recordó este viernes la subdelegada del Gobierno, Maica Larriba, "el uso del teléfono mientras conducimos multiplica por cuatro el riesgo de accidente. Varios estudios sobre la materia indican que tras un minuto y medio hablando por el móvil, incluso con el manos libres, mientras conducimos se dejan de percibir el 40% de las señales y reducimos la velocidad en más del 12%. Esos mismos análisis comparan el uso del móvil con conducir bajo los efectos del alcohol".
Lo hizo junto a la N-550, durante la presentación de una nueva campaña de la DGT de concienciación y de vigilancia en el uso del teléfono durante la conducción. Un acto en el que estuvieron presentes varios miembros de la Asociación de Personas con Lesión Medular y Otras Discapacidades Físicas (Aspaym), que se aproximaban a los conductores previamente detenidos por agentes de la Guardia Civil de Tráfico y, con su propio ejemplo, les exhortaban a que no corras, no bebas, no cambies de ruedas, que es precisamente el lema de la campaña.
Larriba destacó que la vigilancia será exhaustiva no solo en forma de controles, sino a través de las cámaras que la DGT tiene instaladas por la red provincial.
"El año pasado en Pontevedra fueron sancionados 3.024 conductores por el uso del móvil mientras conducían, lo que supone un 39% más que en 2019, es decir, que el endurecimiento de las sanciones llevada a cabo con la reforma de la ley era muy necesaria", dijo.
También apuntó que, en lo que va de año, se han computado cinco fallecidos en accidentes.
Simplemente llevar el móvil en la mano es motivo de sanción: 500 euros y seis puntos. Otras infracciones son comer o beber al volante
ACCIDENTES. La subdelegada reconoció que, aunque parezca una contradicción, las cifras de siniestralidad en las carreteras pontevedresas "son buenas, porque desde el 1 de enero hasta el 31 de agosto solo hemos tenido cinco fallecidos en las carreteras interurbanas, mientras que en 2019 –el último año que podemos comparar sin tener en cuenta las restricciones a la movilidad por el covid-19– los fallecidos fueron 18. Incluso en 2020 la cifra de muertos fue de 14 personas y el pasado año de 17", desglosó Maica Larriba, quien a pesar de la reducción instó a seguir extremando la precaución, "ya que el número global de accidentes se ha incrementado en la provincia".
Manuel Varela, de Aspaym, que sufrió una lesión medular hace 50 años por un accidente de tráfico, animó a los conductores "a manter a velocidade adecuada, non facerlle caso ó movil, importantísimo levar posto o cinturón de seguridade, o casco na moto e estar moi atentos á carretera".
Sobre su protagonismo en la campaña destacó lo importante de que los conductores vean "que non somos actores, que somos víctimas reais e que o que me pasou a min con 20 anos pódelle pasar a calquera que non teña coidado".
