Baleares en la montaña

No todo es sol y playa en las islas. Se trata de uno de los destinos que mejor combinan turismo y deporte gracias a su relieve
La bici de montaña es uno de los mejores medios para conocer Baleares y hacer deporte
photo_camera La bici de montaña es uno de los mejores medios para conocer Baleares y hacer deporte

BALEARES es uno de los destinos que mejor combinan el turismo con el deporte, por lo que son muchos los deportistas, tanto profesionales como aficionados, que participan en las competiciones que se celebran en el archipiélago. Su relieve, en el que predominan las zonas llanas, que conviven con accidentes montañosos; los torrentes, canales de agua más característicos del archipiélago; gran cantidad de cuevas; costas agrestes y largas playas… es el escenario ideal para la práctica del deporte de montaña.

Los deportistas más aventureros, esos amantes de las emociones fuertes y el contacto más directo con la naturaleza, encuentran en Baleares un destino perfecto, y no solo por esa orografía y ese clima, sino también, y muy especialmente, por otra característica propia del archipiélago: ese entorno es la consecuencia de siglos de perfecta convivencia del hombre con su hábitat; es un ejemplo de sostenibilidad en el que el ser humano ha logrado mantener las características naturales de su entorno sin dejar de disfrutarlo y utilizarlo, incluso, para su proceso productivo.

Una de las actividades en las que más destaca Mallorca como destino de aventura es en la escalada en roca



TRAMUNTANA. En Mallorca los ciclistas encuentran el terreno ideal cuando afrontan las ascensiones a los picos de la Serra de Tramuntana, o sus descensos y sus sucesiones de curvas cerradas. Para los más atrevidos, aquellos que disfrutan con los saltos en barrancos y los descensos por cañones y gargantas, la zona central de la Serra de Tramuntana tiene numerosos rincones. Por ejemplo la ruta Gorg Blau-Sa Fosca o el Torrent de Pareis.

Pero en una de las actividades en las que más destaca Mallorca como destino de aventura es en la escalada en roca, por sus abundantes salientes, bloques y peñascos. Los alpinistas señalan especialmente lugares como Sa Gubia, los riscos de la península de Formentor y las calas de Porto Cristo y Cala Barques, por ejemplo.

Con estas características, no es extraño que se celebren en Mallorca importantes competiciones cada año. Es el caso de la K42 y la K21 Mallorca, en el municipio de Calviá, dos carreras —la primera muy dura y la segunda ideal para iniciarse— que permiten disfrutar de la privilegiada naturaleza mallorquina practicando el ‘trail running’.

En Ibiza hay muchos itinerarios para recorridos en bici, tanto en la modalidad de cicloturismo como para BTT



Pequeñas pero matonas. No por ser las pequeñas tienen menor interés las Pitiusas para los deportistas, fundamentalmente para senderistas y cicloturistas, además de los amantes de los deportes náuticos, por supuesto. En Ibiza hay muchos itinerarios para recorridos en bici, tanto en la modalidad de cicloturismo como para BTT pero, además, se convocan también varias competiciones deportivas como la Vuelta a Ibiza Internacional en Mountain Bike, Ibiza Trail Maratón o la Vuelta Cicloturista a Ibiza.

A la pequeña Formentera se la identifica en muchas ocasiones, y no sin razón, con la bicicleta, que es el medio de transporte de muchos de sus visitantes. Las cortas distancias a recorrer y la naturaleza casi intacta en la isla invitan a no utilizar otro medio para desplazarse o hacer deporte que la bicicleta.

El cuidado de la naturaleza es, precisamente, una de las características de la Media Maratón Illa de Formentera, que ha recibido en muchas ocasiones la petición de ampliar el número de participantes y no ha accedido a ello porque la peculiaridad de la isla hace difícil dotar a la carrera de la infraestructura que precisaría para un mayor número de corredores.

Playas, valles y barrancos hacen de Menorca un lugar privilegiado para senderistas, ciclistas y amantes del barranquismo



También tiene sus particularidades Menorca, sin duda, debido a su condición de Reserva de la Biosfera. Pero aquí, como en el resto del archipiélago, la convivencia entre el hombre y su entorno no ha hecho históricamente más que contribuir al mantenimiento y desarrollo de cultural y del propio hábitat.

Su paisaje es muy variado: playas, valles, barrancos… que hacen de la isla un lugar privilegiado no solo para senderistas y ciclistas, sino también, por ejemplo, para los amantes del barranquismo. Y es que Menorca tiene alrededor de 50 grutas terrestres que se abren a nuestros ojos entre acantilados y barrancos.

Pero también los aficionados a la espeleología encuentran en esta isla un destino a su medida. Cuenta con más de una decena de cuevas submarinas, algunas de grandes dimensiones como la Cueva d’es Coloms, llamada, debido a su tamaño, La Catedral.

En la isla de la bici por excelencia, Formentera, hay una red de Circuitos Verdes que permite conocer la isla del modo más natural



Las competiciones que se celebran en esta isla Reserva de la Biosfera tienen como componente añadido el disfrute de un paisaje respetado y cuidado. Es el caso de los 210 kilómetros que recorren los participantes de la Ruta de los Faros de Menorca con sus bicis o del Compressport Trail Menorca Camí de Cavalls.

Por las mejores rutas. El Compressport Trail es una prueba de ultrafondo menorquina y lleva el nombre de una de las rutas más importantes de la isla: el Camí de Cavalls —Camino de caballos—, debido a que parte de su recorrido se realiza por dicho sendero. Este camino, que ya existía en el siglo XIV, rodea toda la isla de Menorca y fue un elemento esencial para que las caballerías defendieran a la población de las invasiones. Fue, también, fundamental para comunicar entre sí las diferentes torres que vigilaban el Mediterráneo.

Ya desde el principio este camino permitía la libre circulación de los habitantes de la isla y los propietarios de tierras por las que atravesaba el camino tenían no solo la obligación de asegurar esa libre circulación sino también la de mantener el camino despejado.

Actualmente, el Camí de Cavalls, totalmente rehabilitado y recuperado de lo que en la época británica era un camino militar que los correos recorrían a caballo, es una ruta homologada como GR 223 de unos 200 kilómetros, dividida en 20 etapas, que se puede recorrer a pie, en bici o, como manda la tradición, a caballo.

El Compressport Trail es una prueba de ultrafondo menorquina y lleva el nombre de una de las rutas más importantes de la isla



Otra ruta que forma parte del pasado isleño son los caminos de Pedra en sèc (piedra en seco) de Mallorca y muchas de las diferentes competiciones que acoge la isla hacen alguna parte de su recorrido por este camino. Es uno de los mejores modos de disfrutar la Sierra de Tramuntana. A través de paisajes salpicados de muestras de este tipo de construcción tradicional se descubren vestigios históricos, tradiciones, gastronomía… La técnica tradicional de la Pedra en sec consiste en la construcción en piedra pero sin ninguna argamasa para unirlas, utilizando solo una colocación correcta basada en el máximo contacto entre las piezas y la ayuda de la gravedad.

Es un recorrido de unos 283 kilómetros y al final de cada etapa el senderista encuentra un refugio en el que descansar que ofrece alojamiento y manutención. Se trata de antiguas casas rehabilitadas de arquitectura tradicional, de modo que los refugios están integrados en el paisaje y respetan el patrimonio cultural de la zona.

En la isla de la bici por excelencia, Formentera, hay una red de Circuitos Verdes que permite conocer la isla del modo más natural y ecológico: a pie o en bicicleta. Calas, playas, dunas, paisajes agrícolas, pinares, arquitectura típica… todo ello se va recorriendo en los 19 itinerarios que conforman los circuitos.

Cualquiera de estos recorridos permite encontrar parajes prácticamente desconocidos porque no son accesibles con vehículo. Recónditas playas, caminos agrícolas, pequeños y tradicionales pueblos...

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