Caca, culo, pis..., de palabras prohibidas a protagonistas de cuentos

Los niños de diferentes generaciones solo decían algunas cosas entre risas. Ahora se encuentran entre los títulos de sus lecturas
Un grupo de niños, con sus padres y abuelos
photo_camera Un grupo de niños, con sus padres y abuelos

Caca, culo, pedo, pis.... esas palabras casi "prohibidas" que los niños de diferentes generaciones han pronunciado entre risas abandonan su territorio de irreverencia para convertirse en protagonistas de cuentos infantiles recién publicados por diferentes editoriales. Dedicada al conocido autor japonés para niños Taro Gomi, la editorial Blackie Little Books ha inaugurado este otoño una colección que ha comenzado con un clásico, Todos hacemos caca, que acaba de llegar a las librerías en castellano.

Con un millón de ejemplares vendidos en todo el mudo, este cuento explica en 36 páginas y con grandes dibujos los hábitos de diferentes animales y de las personas porque, dice el autor, "todos los seres vivos comemos y por eso... !todos hacemos caca!". Del sello Cubilete, de la editorial Bruño, llega también ¡Caca de dinosaurio!, de Diane y Christyan Fox, un álbum para motivar al niño a usar el orinal o a ir él solito al baño a través de solapas en las que irá descubriendo cacas y más cacas de dinosaurio.

Dinosaurios que se disponen a buscar la "más grande" sin darse cuenta de que cuando se trata de cacas "¡no solo importa el tamaño!". De estas deposiciones infantiles, pero también de "pedos" (otra de las palabras malditas) va también El gran concurso de la caca de Guido van Genechten, en la editorial SM.

Este libro, dedicado a niños de 3 a 6 años y a padres que quieran reirse con ellos, relata cómo cada año el rey Pedorro I pide al ministro de Pedos y Cacas que organice El gran concurso de la caca. De este autor, Guido van Genechten, son también El libro de los culitos o ¿Puedo mirar tu pañal?, ambos destinados a esos pequeños que van a empezar a aprender a usar el orinal. Un aparato desconocido para Elefantito, otro protagonista de Van Genechten, que un día recibe un regalo, pero no sabe qué es y lo usa como casco, pecera y volante, hasta que su padre le explica para qué sirve.

La gran caja de los culetes es otra de las apuestas otoñales de Bruño que, como indica su nombre, es un álbum caja en la que si uno mira encontrará una gran colección de dibujos de culos de animales. Algunos malolientes, otros apestosos, pero también suaves y redonditos, gigantes o altos... muchos traseros del mundo animal aparecen en este cuento para descubrir al final que cada niño también tiene uno que seguro "es el mejor del mundo".

Pero no todo van a ser cuentos de deposiciones....También hay otros libros educativos dedicados a temas no muy tradicionales como es el caso de los piojos. "¡Cómo me pica!", de Timunmas Planeta, es el título de este cuento dirigido a niños a partir de un año, obra de Anna Canyelles y Agustín Comotto.

Aunque parezca imposible, los bichitos protagonistas de este cuento recuerdan que "la vida es así": Y es que Tomás y Rosa tienen piojos. Les pica la cabeza y por mucho que corran, griten y salten, el picor es desesperante. Se supone que con un buen tratamiento, los piojos no volverán jamás!...¡o no!". Y para acabar con los complejos de los niños a los que todavía se les escapa el pis... El fantasma Quememeo, un álbum ilustrado escrito por el poeta Andreu Galan e ilustrado por Luis Demano, en el que este fantasma se lleva las culpas cuando la cama se moja.

Editado por Andana, además de unas divertidas ilustraciones, el álbum contiene cuenta con un póster-calendario para que los niños puedan recordar las noches en las que Quememeo no ha ido de visita.

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