Rafael Galiana, padre, junto a su marido, de dos hijos nacidos en Estados Unidos por gestación subrogada, es secretario de la Asociación Son Nuestros Hijos, constituida en Madrid en 2013 y formada en la actualidad por alrededor de 900 familias de toda España con hijos nacidos gracias a esta técnica de reproducción asistida.
¿Cuál es el perfil mayoritario de las familias?
El 60/70% son parejas heterosexuales en las que ellas no pueden gestar y no pueden adoptar, principalmente por enfermedad, porque uno de los requisitos que te hace apto para poder adoptar es que estés sano. Una mujer que ha tenido un cáncer o incluso una cardiopatía de nacimiento no puede adoptar.
Pero, en otros casos, ¿no es la adopción una buena alternativa?
Dentro de lo desafortunado que es que existan niños para adoptar, no es como hace 40 años, cuando los orfanatos estaban llenos. Es cierto que hay muchos niños para acogida o tutelaje, pero son niños que los tienes una temporada y luego tienen que volver. Niños huérfanos no hay tantos para la demanda que hay. Las listas de espera son larguísimas y, si hablamos de la adopción internacional, olvídate, y también pagas. Se dicen muchas falacias...
¿Cómo cuales?
Como que la gente recurre a la gestación subrogada para la continuidad de los genes, Eso es otra mentira porque hay mujeres que no pueden gestar y son madres solteras por gestación subrogada de gametos de un donante masculino y de una donante femenina. Y, evidentemente, en el caso de las parejas homosexuales que tienen un hijo, uno de los padres de intención no aporta material genético.
¿Cómo se vive desde la asociación el ‘huracán Obregón’?
Por un lado, el caso Obregón nos ha hecho un favor porque ha vuelto a sacar a la palestra un tema que es una realidad y, además, lo ha puesto sobre la mesa con todas las de la ley y hasta ha llegado al Congreso. Por otro lado, Ana Obregón ha puesto sobre la mesa aspectos morales que hacen mucho ruido y lo embarullan todo como, por ejemplo, hasta qué edad una persona puede recurrir a una técnica de reproducción asistida o si se puede utilizar material genético de una persona fallecida. Esto genera mucho ruido y aquí mucha gente habla y poca gente escucha.
Las cifras en España son dispares. Por un lado, según datos del Gobierno, entre 2010 y 2020 se registraron en nuestro país más de 2.520 bebés nacidos por este método y, por otro, las asociaciones de familias hablan de mil nacimientos al año...
Ese dato muchas veces no se puede comprobar. En el caso de parejas homosexuales es evidente porque si tú presentas un parte de nacimiento alguien tiene que haberlo gestado, pero en el caso de las parejas heterosexuales, cuando vas al registro, al consulado de Los Angeles, Chicago o donde sea, tú presentas un certificado de nacimiento y ahí no aparece la gestante. Pero, sin duda, la cifra es grande.
¿Cuáles son las principales reivindicaciones de ‘Son Nuestros Hijos'?
Una regularización de la gestación subrogada en España basándose, siempre, en procesos en los que no haya ningún tipo de abuso o aprovechamiento de la vulnerabilidad de las mujeres que donan la capacidad de gestar y que estos procesos sean garantistas: la mujer que lo realiza tiene que estar perfectamente informada, hacerlo de manera voluntaria y no verse en ningún tipo de situación de vulnerabilidad. También sería importante que estuviera supervisado o auditado por el Gobierno y, por supuesto, que fuera por la Seguridad Social para que todo el mundo pudiera recurrir a ella.
"En absoluto es cosa de ricos. La mayoría o la totalidad de las familias tienen que hipotecarse"
¿Hoy en día es un proceso al que solo tienen acceso los ricos?
En absoluto es cosa de ricos. La mayoría o la totalidad de los padres por gestación subrogada tienen que hipotecarse para muchos años para poder llevar a cabo sus procesos.
¿Qué responde a los que hablan de compra de bebés, de mercantilización del cuerpo de la mujer o de esclavitud?
Se están mezclando muchos aspectos y uno de ellos es si cobran o no cobran. Hay que tener en cuenta que lo que cobra la mujer es una compensación, un incentivo que de ninguna manera le sale a cuenta. El modelo americano contempla una compensación porque las mujeres gestantes dedican un año de su vida a esto: tienen que cuidarse, cambiar sus relaciones íntimas con su marido, las relaciones con sus hijos... Por otra parte, es importante la terminología. Es una hipocresía lo que está haciendo el Gobierno español actualmente porque, si bien es verdad que ha introducido la gestación subrogada como violencia contra la mujer y ahora nos están señalando con el dedo de una manera terrible, en la Seguridad Social cuando tú pides tu permiso de 16 semanas hay una casilla de gestación subrogada. La Seguridad Social, la Ley de Reproducción Asistida de 2006, la Organización Mundial de la Salud, el Parlamento Europeo... todos utilizan gestación subrogada o gestación por sustitución. Ese es su nombre. No se utiliza ‘vientre de alquiler’. Eso es algo peyorativo, como si ahora habláramos de niños probeta, subnormales o bolleras y maricones.
De los países en los que es legal, ¿cuál ofrece más garantías?
Estados Unidos y Canadá (cuyo modelo es altruista) porque hay un juez que está auditando eso. De todas maneras, la asociación es la primera que ha ido al ministerio a denunciarlo si conoce algún caso de mala praxis o alguna agencia o clínica que está realizando algún tipo de abuso.
¿A nivel de aceptación social las familias se han encontrado con algún problema?
Yo no tengo constancia de nadie que haya tenido un enfrentamiento directo con alguien de la calle. Ese ruido que hay en redes o a nivel medios de comunicación no está reflejado en la calle.
