Espectáculo, buena fiesta y algún famoso

EN UNA TARDE de sol radiante, aunque el viento del Norte resultaba un poco incómodo, comenzaba la Feria taurina de A Peregrina. Todo estaba preparado en el coso de San Roque, nada podía salir mal porque la expectación era máxima y las grande figuras del cartel de ayer no defraudaron. Mención a parte merece la afición, las peñas y todo el público que se entregó en una tarde de mucha lidia y trajes de luces.

La plaza estaba a rebosar aunque no llena del todo. La Feria comenzaba con la tradicional banda sonora de toda tarde de toros que se precie a cargo de la banda de música que no dejó de amenizar el espectáculo en cuanto se lo permitían sus protagonistas, los toreros. Acto seguido, como me dijo el propio Eduardo Lozano en su entrevista, el público le dio en las narices a los perseguidores de la fiesta desplegando una pancarta con el lema de PONTEVEDRA TAURINA.

Salieron los toreros y el fervor era máximo, especialmente interesado y expectante se le veía a Sebastián Palomo Linares que no dejaba de hablar con la gente en el callejón, desde allí siguió toda la corrida. También disfrutaron de la tarde la política Corina Porro y Marisol Bueno, dueña de la prestigiosa bodega Pazo Señoráns, que se despidieron de sus amigos con un ‘hasta mañana’, por lo que será probable verlas en el gran espectáculo de hoy con las máximas figuras del rejoneo. También mención especial merecen los dos críticos taurinos renombrados de nuestro país, Andrés Amorós de ABC y Vicente Zabala de la Serna de El Mundo, que llevarán el nombre de Pontevedra por el mundo. Javier Riollo, director del Insitituto Cervantes de Lisboa, fue otro de los asistentes a la cita taurina.

Fueron muchos los que se dejaron las muñecas pidiendo las orejas para ‘El Juli’ y Morante de la Puebla, ya que Enrique Ponce no tuvo su mejor tarde. Los jueces eran bastantes exigentes pero el público pontevedrés tampoco regala los premios.

Otro rostro conocido y ya habitual en la plaza de Pontevedra es el empresario Fernando Fernández Tapias que se dejó ver junto a su mujer, Nuria González, y un grupo de amigos. En ocasiones también se le pudo ver por el callejón junto a Palomo Linares.

El toque de color y fiesta lo pusieron las peñas que sin duda amenizaron la tarde junto a la banda de música que acompasaba con los pasodobles las lidias de los toreros. Muchos cánticos, música y buen ambiente. Nada más comenzar la Feria, la peña Gin-Kas hizo su tradicional baile de la sombrilla y su tirada de nieve. También asistieron dos peñas taurinas de A Coruña, Peña Taurina de A Coruña y Peña Taurina Cuatro Caminos. Quizá se han acercado a la ciudad del Lérez ahora que se han quedado sin toros allí.

La estrella fue ‘El Juli’ que brilló con luz propia. ¡Qué elegancia! Cortó cuatro orejas y salió a hombros de la plaza que rebosaba de alegría cuando la estocada de su segundo tenía el éxito esperado, certera y directa. Ojalá se repita hoy el éxito de ayer con el rejoneo de Mendoza y Diego Ventura.

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