Nacida en Madrid en 1942, Marisa Medina comenzó su carrera profesional en TVE, donde en 1964 pasó a formar parte de la plantilla de locutores y en los años siguientes se convirtió en uno de los rostros más populares de la cadena, en la que presentó la casi totalidad de los festivales de la canción.
El 25 de mayo de 1970 contrajo matrimonio con el compositor Alfonso Santisteban y tuvieron tres hijas: Silvia (1974), Alexandra (1976) y Laura (1983). En marzo de 1994, ambos presentaron de mutuo acuerdo la demanda de divorcio.
Dentro del mundo de la canción, realizó diversas galas por España y grabó varios discos, aunque sin demasiado éxito.
Tras cinco años de ausencia de la pequeña pantalla, en enero de 1990 regresó a TVE para colaborar en el programa Buenos días. Al año siguiente, en febrero de 1991 presentó en TVE el espacio semanal Llave en mano, dedicado a la vivienda, en el que abordaba aspectos relacionados con la arquitectura, la decoración y la legislación, en colaboración con especialistas.
Alejada de la televisión, Marisa Medina cayó en la droga y el juego, reconociendo haber perdido 150 millones de pesetas. Una vez fuera de estas adicciones, reflejó sus vivencias en el libro Canalla de mis noches (2003) y el poemario La droga solitaria (2008).
Fue además autora de otros libros, como Tiempo de despertar (1969), La raza maldita (1980), Muñequita linda (1981), Rosas negras (1995), Prohibido para maridos (2005).
En 2005, la Asociación Profesional Española de Informadores de Prensa, Radio y Televisión (APEI-PRTV) le concedió uno de sus premios 'Entrañables'.