El rey Juan Carlos ha comenzado de forma satisfactoria los ejercicios de rehabilitación posteriores a su operación de rodilla, que lleva a cabo en el Palacio de la Zarzuela con el médico rehabilitador Fernando Serrano y el fisioterapeuta Alejandro Huerta, según han informado fuentes médicas.
Al tratarse de una intervención quirúrgica no motivada por un traumatismo, los trabajos de rehabilitación pudieron programarse con antelación y los preparativos comenzaron antes de la operación a la que se sometió el pasado sábado don Juan Carlos en el Hospital Sanitas La Moraleja para sustituir por una prótesis nueva la que le fue implantada en la rodilla derecha siete años antes.
La intervención, dirigida por el jefe de Traumatología del hospital, Primitivo Gómez Cardero, duró unos 90 minutos y permitió "restaurar la alineación anatómica y mejorar la estabilidad de la rodilla y la función articular", según el comunicado que facilitó el centro médico tras la operación.
Se trataba de la novena intervención quirúrgica en las articulaciones a la que se sometía el rey Juan Carlos en los últimos siete años y la primera tras la de noviembre de 2013, cuando el cirujano Miguel Cabanela le implantó una prótesis definitiva en la cadera izquierda después de atajar la infección que le había provocado una anterior.
Don Juan Carlos recibió este martes por la mañana el alta hospitalaria y, al abandonar el centro médico, comentó con los informadores que todo había ido "muy bien", que estaba "muy contento" y que tras la operación podría caminar "mucho mejor", antes de referirse con humor a los ejercicios de rehabilitación que empezaría a realizar a partir de entonces en el Palacio de la Zarzuela: "Ahora me toca sufrir".
