Cuando el verano llega a su fin y se lleva el sol, se acaban las vacaciones y las escapadas a la playa. Aunque tengamos que dejar de lucir nuestros outfits veraniegos, sería ideal poder mantener ese bronceado que tanto nos ha costado conseguir durante la temporada estival. Además de productos que mantienen el moreno —como autobronceadores y polvos de sol— y alimentos que mantienen el moreno de la piel —como la zanahoria y la naranja—, la elección de las prendas que componen un outfit también son un factor fundamental para potenciar el tono bronceado de nuestra piel.
Pero, ¿cuál es el secreto para seguir estando moreno después de que se haya ido el sol? Para empezar, el blanco es el gran aliado para mantener el bronceado. El color blanco y los tejidos ligeros son perfectos para potenciar el color de la piel, ya que el contraste entre el blanco brillante y nuestro tono natural hará que aparentemos estar más morenas de lo que realmente estamos.
Así, es conveniente mantener cierto estilo ibicenco en nuestros outfits, luciendo looks con prendas blancas, siempre acompañadas de complementos que los adecúen a los meses de otoño. Pero hay otros colores como el amarillo, coral, verde, azul cielo y rosa en su versión más ácida que también ayudan a resaltar la piel morena. Estos tonos son ideales para los complementos como collares, pendientes, bolsos o fulares.
Para esta temporada, las telas vaporosas como la seda y el satén serán estrellas de cualquier armario que se precie. Esto funciona genial para lucir una piel más morena, ya que la combinación de colores claros y oscuros, junto a los estampados con prints grandes, hacen que la piel se vea radiante.
