Agentes de la Guardia Civil han detenido en el peaje de autopista AP-9 en Vilaboa (Pontevedra) a cuatro madrileños, con edades comprendidas entre los 28 y 40 años, que llevaban escondidos en su vehículo 4.000 comprimidos de ansiolíticos y un lote de recetas falsas.
Según ha informado el instituto armado, a los cuatro hombres, todos ellos vecinos de la Cañada Real (Madrid), se les acusa de un delito contra la salud pública y de un delito de falsificación de documentos.
La detención se produjo el pasado viernes en un control de vehículos rutinario que realizaba la Guardia Civil en la autopista.
Los ocupantes del coche, al detectar la presencia de los agentes, intentaron eludir el control fingiendo que no les funcionaba la tarjeta de paso del peaje.
Tras una exhaustiva inspección, los agentes localizaron 3.930 comprimidos de Rivotril (Clonazepam) y 37 recetas falsificadas, escondidas en distintas partes del interior del turismo.
El Rivotril, recuerda la Guardia Civil, es un medicamento que tiene como componente activo el cleozepam, perteneciente al grupo de las benzodiacipinas, utilizadas estas como ansiolíticos y anticonvulsivos, por lo que precisa de prescripción médica obligatoria mediante receta para su dispensación.
Las diligencias instruidas se entregaron en el Juzgado de Instrucción número 1 de Cangas.
