Detienen a un hombre en Vigo por robar vestidos por valor de 600 euros

Agentes de la Policía Local de Vigo han detenido a un vecino de 46 años, que responde a las iniciales A.L.A.L., por hurtar en una tienda de la calle Príncipe cuatro prendas de ropa, valoradas en un total de 600 euros. La Policía Local ha informado de que los hechos ocurrieron sobre las 15.45 horas de este jueves, cuando la encargada de una tienda manifestó que momentos antes un individuo -del que aportó las características físicas- había sustraído cuatro vestidos de piel marrón.

Los agentes recorrieron las inmediaciones y encontraron en la confluencia de las calles Ronda de Don Bosco con la calle Placer, a un varón que coincidía con las características físicas aportadas y que portaba una bolsa, quien al percatarse de la presencia policial intentó eludirlos.

Los efectivos policiales fueron tras él y consiguieron darle alcance, descubriendo que en la bolsa llevaba los cuatro vestidos hurtados, con sus perchas, sus alarmas y sus etiquetas, valorados cada uno en 149,99 euros. Por todo ello, procedieron a su detención.

MÓVIL. Agentes de la Policía Local de Vigo identificaron este viernes a un varón menor de edad como presunto autor del robo de un teléfono móvil, ocurrido este viernes en el interior de una vivienda del centro de la ciudad olívica. Según ha informado la Policía Local, pasadas las 13,30 horas de este viernes recibieron la alerta de que un individuo había entrado en una vivienda de la zona peatonal de Urzáiz y había robado un móvil de su interior.

Un testigo dijo que el autor se había escondido en un chalet abandonado de la calle Navarra, por lo que los agentes se trasladaron hasta el lugar. Allí localizaron a un menor de edad, que daba respuestas diferentes a las preguntas de los policías. El chico accedió finalmente a dar su nombre y fue cacheado, con lo que hallaron en el bolsillo de su chaqueta el teléfono robado.

El menor también indicó que su madre trabajaba en una pescadería, por lo que los efectivos policiales se desplazaron a hablar con ella. La mujer indicó que su hijo había sido expulsado del instituto durante unos días por su mal comportamiento, y reconoció que se junta "con malas compañías", no accede a ducharse y le desobedece, motivos por los que está en trámites con la Xunta para tratar de "controlarle".