El hombre que se atrincheró con una escopeta en la vivienda de su expareja en Cangas do Morrazo durante tres horas falleció de madrugada en el hospital al que fue trasladado tras dispararse en un hombro. M.V. tenía 52 años y era muy conocido en la localidad. Desde hace días pesaba sobre él una orden de alejamiento de su expareja, con la que había protagonizado incidentes últimamente, llegando incluso a agredirla con un cúter.
El hombre, que padecía problemas psiquiátricos, entró a las 21.30 horas en la vivienda, situada en la Avenida de Lugo. En aquel momento realizó un disparo al aire, aunque no se registraron heridos.
Según informa la Guardia Civil, su esposa salió del inmueble asustada al ver el arma y se dirigió a las dependencias de la Benemérita. Varias patrullas de la Policía Local y de la Guardia Civil se mantuvieron en la zona durante varias horas.