Gabriel murió estrangulado el día que desapareció y su cuerpo presenta golpes

La Guardia Civil cree que Ana Julia Quezada actuó sola ►Los padres llevaban días actuando ante la captora del pequeño ►Investigan la muerte de una de las hijas de la arrestada

La detenida consuela a su pareja y padre de Gabriel ante la mirada de la madre del niño. CHEMA ARTERO (EFE)
photo_camera La detenida consuela a su pareja y padre de Gabriel ante la mirada de la madre del niño. CHEMA ARTERO (EFE)

La autopsia del cadáver de Gabriel Cruz ha revelado que el pequeño murió estrangulado el mismo día que desapareció, según han informado fuentes judiciales. La noticia ha causado un pequeño alivio en el entorno familiar, que temía que el pequeño hubiese pasado varios días cautivos antes de su fallecimiento, un temor que este lunes habían confesado a varios periodistas. Al parecer, el cuerpo del pequeño presentaba también varios golpes, aunque por el momento no está claro si los mismos tienen relación con la causa de la muerte.

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha lamentado este lunes que a Gabriel Cruz "le quitaron la vida a muy pocas horas de que desapareciera y se pusiera de manifiesto que estaba el niño perdido". Así lo ha afirmado en declaraciones a los medios tras visitar la capilla ardiente del menor, instalada en el Palacio Provincial de la Diputación de Almería, donde ha conversado con los padres del menor, con los que ha compartido abrazos y gestos de cercanía y solidaridad, acompañado del presidente del PP-A, Juanma Moreno.

"Les dije que vendrían los mejores y que vendrían con todos los medios. Y ellos se han dado cuenta de que es verdad. Que vinieron los mejores, es verdad que traían medios. Lo han encontrado, pero desgraciadamente sin vida, porque la vida se la quitaron a muy pocas horas de que desapareciera y se pusiera de manifiesto que estaba el niño perdido", ha incidido.

Zoido: "A Gabriel Cruz le quitaron la vida a muy pocas horas de que desapareciera y se pusiera de manifiesto que estaba el niño perdido"

La principal hipótesis con la que trabajan los investigadores del caso es que la principal sospechosa de la muerte del pequeño, la dominicana Ana Julia Quezada, pareja sentimental del padre de la víctima, actuó sola. Además, a raíz de la desaparición y muerte del pequeño Gabriel, la Policía está revisando los informes relativos a la muerte accidental de una hija de la detenida en Burgos en el año 1996.

Así lo han indicado fuentes de la investigación, que han precisado que, de todos modos, todas las hipótesis permanecen abiertas, incluido el móvil que pudo llevar a Quezada a acabar con la vida de Gabriel. Hasta el momento, se trabaja sobre la tesis principal de que se trate de un móvil pasional o sentimal. Sin embargo, no se descarta que existiese alguna motivación económica, dado que la detenida sugirió a su pareja que ofreciese una recompensa de 30.000 euros por cualquier pista sobre el pequeño, porque los 10.000 euros que habían prometido los padres le parecía una cantidad baja.

REGISTROS. Por todo ello, la Guardia Civil inspecciona este lunes la finca de la localidad nijareña de Rodalquilar en la que se encuentra el pozo en el que supuestamente ocultó Ana Julia Quezada el cadáver del niño.

Desde primera hora de la mañana miembros de la Policía Científica se encuentran sobre el terreno y el entorno ha sido acordonado para evitar el paso de los numerosos medios que se encuentran en la zona próxima a la finca, propiedad de la familia del menor fallecido.

La Guardia Civil inspecciona la finca en la que se encuentra el pozo en el que supuestamente ocultó Ana Julia Quezada el cadáver del niño

Poco después de las 12:30 horas han llegado al lugar unos cinco vehículos policiales, aunque se desconoce si Ana Julia, se encuentra en uno de ellos o será conducida más adelante al registro, debido a que todas las fuentes consultadas remiten al secreto decretado por el juzgado sobre las actuaciones practicadas.

Los agentes de la Policía Científica y la Policía Judicial trabajan junto a los investigadores en la finca, con el apoyo además de los canes del Servicio Cinológico de la Guardia Civil. 

EL CASO. Las fuerzas de seguridad encontraron el domingo el cadáver del niño de 8 años desaparecido el 27 de febrero en Las Hortichuelas (Níjar, Almería), en el maletero del coche de la pareja del padre del menor, que ha sido detenida en la localidad de Vícar rodeada de un amplio operativo policial.

La detenida como presunta autora de la muerte de Gabriel Cruz se trata de Ana Julia Quezada Cruz, de origen dominicano y que mantenía desde hace apenas unos meses una relación con el padre del menor, Ángel Cruz, según los familiares de este.

A la hora en la que se perdió el rastro del niño, hace 13 días, solo ella y la abuela del pequeño estaban en la casa de esta última junto al niño. Vecinos de Las Hortichuelas han asegurado a Efe que comenzaron a sospechar de ella cuando, el pasado sábado 3 de marzo, Quezada afirmó haber encontrado una camiseta interior de color blanco del menor cuando caminaba junto al padre del desaparecido. Esa camiseta blanca contenía restos de ADN del niño.

Durante el interrogatorio al que la sometieron el viernes, la Guardia Civil le puso un cebo: el domingo la siguieron cuando se disponía a mover el cadáver

Con el hallazgo del cadáver y la detención de Quezada y su traslado a la Comandancia de Almería se ha puesto fin a trece jornadas de angustiosa búsqueda de Gabriel, en la que según los datos de la Delegación del Gobierno en Andalucía trabajaron 1.487 profesionales y 2.574 voluntarios.

Los trabajos en la línea de costa, las batidas, búsquedas "selectivas" en pozos, cuevas, cortijos abandonados y zonas por las que habitualmente no pasa nadie se vieron acompasados por un masivo apoyo social en redes sociales a la familia.

En un primer momento la investigación parecía apuntar a un vecino de Antas (Almería), detenido dos días después de la desaparición por incumplir una orden de alejamiento respecto a la madre de Gabriel y que acababa de ser condenado en febrero a seis meses de prisión por quebrantar la orden de alejamiento respecto a ella.

LA TRAMPA. Pero la aparición de la camiseta habría puesto el foco de los investigadores sobre Quezada, que finalmente ha sido arrestada en un dispositivo policial en el cual, según fuentes de la investigación, los agentes han acabado abrazándose y llorando al encontrar el cadáver del pequeño.

Durante el interrogatorio al que la sometieron el viernes, la Guardia Civil le puso un cebo. Y así fue como este domingo se ha dirigido al pozo donde había escondido el cuerpo de Gabriel el día de su desaparición. Los agentes la fotografiaron sacando el cuerpo envuelto en una manta. Después la interceptaron y hallaron el cadáver del niño en el maletero.

La investigación deberá averiguar ahora si la mujer contó con algún tipo de ayuda para hacer desaparecer al niño, ya que estaba con la abuela de Gabriel en el momento en que este desapareció.