Un octogenario de A Pastoriza mata a su mujer y se quita la vida tirándose por la ventana

Los primeros indicios apuntan a que la víctima, que fue hallada en la cocina, falleció a causa de un golpe en la cabeza
Lugar en el que se produjeron los hechos. EP
photo_camera Lugar en el que se produjeron los hechos. EP

Un octogenario de A Pastoriza, Hortensio Ónega Murado, asesinó este sábado a su mujer, Manuela Iglesia Fernández, y después se suicidó arrojándose por una ventana, en lo que todo apunta a que se trata de un nuevo crimen machista, tras el ocurrido en Vilalba a finales del mes de julio.

Los hechos, que han conmocionado al concello de A Pastoriza, ocurrieron en el domicilio familiar, conocido como Casa de Paredes y ubicado en la parroquia de Crecente, a última hora de la tarde.

Los primeros indicios apuntan a que la víctima, que fue hallada en la cocina de la vivienda, falleció tras haber recibido un golpe en la cabeza, aunque algunos testigos aseguraban por la noche que había sido acuchillada y que había restos de sangre en el interior de la vivienda. En un primer momento, esto llevó a pensar a los familiares que los encontraron que podría haber alguien más en la casa, algo que se descartó poco después.

El supuesto agresor fue concejal en el Concello de A Pastoriza en la década de los años 90

El supuesto agresor fue localizado en el exterior de la vivienda. Se cree que se arrojó por una ventana de un piso superior, que se encontró abierta. Fue una nieta, que vivía en el domicilio familiar con ellos y con sus padres, la que se encontró a la víctima en el interior de la casa alrededor de las 20.00 horas. En el momento de producirse los hechos ambos estaban solos. Tras conocer lo sucedido, una hija de ambos tuvo que ser traslada en ambulancia al Hula.

La noticia conmocionó a vecinos y familiares, que no dejaban de repetir expresiones de dolor e incredulidad. "Esto é unha película de terror", comentaba una voz, mientras la gente no dejaba de acercarse a la vivienda. "Eu nunca o pensei, levábanse moi ben e ela desvivíase por coidalo", comentaban otros, que aseguraban que "sempre estiveron moi namorados" tras más de 50 años casados y sin problemas.

Ambos eran personas muy conocidos en el municipio, "moi sociables e conversadores", que tuvieron una explotación ganadera y el supuesto agresor fue concejal en el Concello de A Pastoriza en la década de los años 90.

"Ves estas cousas na televisión e nunca imaxinas que pode pasar no teu concello, sempre pensas que as desgracias ocurren lonxe", decían consternados Primitivo Iglesias y Elva Carreira, el alcalde y la teniente de alcade de A Pastoriza, que también se acercaron al domicilio para mostar su apoyo.