Regresa la bandera republicana que acompañó a Azaña en el exilio

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La bandera tricolor que acompañó al presidente de la Segunda República española, Manuel Azaña, en su exilio a Francia, fue entregada este lunes al Ministerio de Cultura de España por la familia de Jean Gregory de Valdés, oficial que protegió la vida de Azaña en el país galo hasta 1940.

Según testigos del entierro del último presidente republicano de España, esta bandera cubrió su ataúd durante unos momento, aunque finalmente fuera la enseña mexicana -la embajada de este país apoyó a Azaña en el exilio- la que lo acompañó en su último paseo por la calles de Montauban (Francia), ante la prohibición expresa del mariscal Philippe Pétain de mostrar la republicana.

Sin embargo, cientos de republicanos españoles se atrevieron, según recordó el ministro de Cultura, César Antonio Molina, a desafiar "la prohibición del gobierno colaboracionista de Vichy portando banderas republicanas para dar el último adiós a quién había sido su presidente".

Bandera del exilio republicano
Durante años, la familia Gregory guardó la bandera, que además ha presidido innumerables actos de la comunidad de exiliados republicanos españoles en Francia, agregó César Antonio Molina. Fue precisamente una hija del oficial, Linda Gregory la que hizo entrega de la enseña, junto con otros documentos, coincidiendo con el 68º aniversario del fallecimiento de Azaña.

A juicio de Molina, esta bandera simboliza "la integridad de un hombre que concibió la política como la más alta expresión de la cultura, que siempre fue leal a su pueblo y coherente con sus ideales hasta sus últimas consecuencias". El Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca será el lugar donde se guardará a partir de ahora.

"Hoy vivimos la España que él (Azaña) imaginó y anticipó mientras pudo: La España Constitucional y de las libertades democráticas", señaló el ministro, para subrayar a continuación que el Gobierno trata de "reparar a la víctimas de ese desgarrador enfrentamiento y sus consecuencias con su Ley de Memoria Histórica".

Al acto acudieron varias decenas de personas, algunos de ellos republicanos históricos, como José Dalmau y Marina Vega, que han cerrado el homenaje a Azaña con vítores a la República y se fotografiaron con la bandera tricolor sobre sus hombros.

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