Un vigués acusado de un delito de lesiones tras propinar un codazo en la cara a otro ha aceptado un condena de dos años de prisión tras el acuerdo de conformidad alcanzado por las partes, y que ha evitado la celebración del juicio previsto para este martes en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en la ciudad olívica.
La Fiscalía pedía inicialmente para Joaquín A.L. una condena de tres años y nueve meses de prisión, pero ha aceptado modificar su escrito de acusación, y tanto la acusación particular como la defensa se han adherido a la nueva petición.
Los hechos se remontan al 31 de octubre de 2017 cuando la madre del acusado paseaba con su perro por el Camiño Redomeira de la ciudad olívica. Por el mismo vial caminaba otro varón, también con su perro, y ambos animales se enzarzaron, por lo que el hombre y la mujer acabaron teniendo un altercado.
El acusado, hijo de la dueña del perro, se encontraba cerca y observó los hechos. Así, se dirigió al varón y le propinó un codazo en la cara, dejándolo inconsciente y haciendo que cayese al suelo. Como consecuencia del golpe, el agredido sufrió un traumatismo craneoencefálico, traumatismo facial, pérdida de un diente y otros traumatismos en la boca, fractura de los huesos propios, y otras lesiones.
Por estos hechos, el procesado ha aceptado una pena de dos años de cárcel e indemnizará al perjudicado en 21.000 euros (incluidas las costas de la acusación). El tribunal ha determinado suspender la ejecución de la pena por un período de 5 años, con la condición de que Joaquín A.L. no delinca en este tiempo, y siempre que pague la indemnización, a razón de 350 euros mensuales durante esos cinco años.
