Los bomberos de Vigo tuvieron que realizar una insólita intervención en la noche del lunes. Después de recibir una llamada desde el Hospital Álvaro Cunqueiro, acudieron pertrechados con una rebarbadora de precisión para cortar el anillo erótico que tenía aprisionado el pene de un hombre, quien se vio incapaz de liberarse del juguete.
La intervención se produjo después de que la víctima acudiera al hospital tras llevar ya varias horas con el miembro preso, lo que le provocaba una importante hinchazón debido a la interrupción de la circulación sanguínea en la zona. El equipo médico no consiguió resolver el entuerto, por lo que se vieron obligados a recurrir al cuerpo de bomberos y su maquinaria de precisión.
ANTECEDENTES EN FERROL. No es la primera vez que ocurre una situación semejante en Galicia. Hace tres años, por estas fechas, otro varón, de unos 45 años, tuvo que desplazarse hasta el Hospital Arquitecto Marcide de Ferrol con un problema idéntico. Los facultativos requirieron también la actuación de los bomberos ante el riesgo que la falta de flujo sanguíneo suponía para el pene del afectado.
Debido a la dureza del metal del anillo —una herramienta usada habitualmente para mantener una erección durante más tiempo, prevenir la eyaculación y provocar un estímulo sexual—, emplearon una sierra radial de precisión para romperlo sin provocar daños al paciente.
