Piden 25 y 10 años para dos acusados de delitos sexuales contra menores

La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, juzgará a los individuos
Sección quinta de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo. GOOGLE MAPS
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La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, juzgará la próxima semana a dos hombres para los que la Fiscalía pide 25 y 10 años de prisión, respectivamente, por sendos delitos de abusos sexuales sobre menores.

El primero de los juicios tendrá lugar el próximo jueves, y la Fiscalía pide que el acusado sea condenado a 25 años de prisión por tres delitos de abusos sexuales contra una menor con una discapacidad reconocida del 33 por ciento con la que mantuvo relaciones sexuales cuando ella no había cumplido los 16 años.

Según la Fiscalía, la joven es una amiga de la hija del acusado, a la cual éste convenció para mantener relaciones sexuales gracias a continuadas conversaciones que mantuvo con ella por whatsapp haciéndose pasar por una vidente de Valencia.

Ambos quedaron en diferentes ocasiones en un monte, donde practicaron sexo, sin que la menor fuese enteramente consciente de las consecuencias de sus actos.

La Fiscalía relata que el acusado amenazó a la menor, asegurándole que le pasaría algo muy malo si se lo contaba a la familia

El segundo de los juicios se celebrará el viernes, y la Fiscalía solicita diez años de cárcel para un hombre que presuntamente abusó de una niña de 14 años, hermana de un niño que, por cesión de su progenitora, tenían en guardia y custodia el acusado y su esposa.

Según el escrito de la Fiscalía, el acusado aprovechó que la joven acudía a su casa para visitar a su hermano y "satisfacer sus instintos libidinosos" valiéndose de la confianza que la niña tenía con él.

La Fiscalía relata que el acusado amenazó a la menor, asegurándole que le pasaría algo muy malo si se lo contaba a la familia, y entonces "procedió a ejecutar sobre la menor un número indeterminado de actos de naturaleza sexual".

Pese a sus temores, la menor acabó confesando lo sucedido a su madre, que denunció los hechos por los que la Fiscalía pide, además de los diez años de cárcel, una indemnización económica de 12.000 euros, ya que la menor arrastra secuelas psicológicas por lo ocurrido.