La pericia de los pilotos de un vuelo de Vueling ha evitado un posible tragedia en el aeropuerto de Peinador, en Vigo, donde este viernes una bandada de palomas se introducía y destrozaba por completo una turbina de la aeronave cuando se encontraba a punto de despegar. En el momento del incidente, el avión se desplazaba a casi 500 kilómetro por hora, la velocidad máxima en pista.
Los pilotos del Airbus A320 de Vueling, que iba a realizar la ruta entre Vigo y Barcelona, tomaron la rápida decisión de abortar la maniobra de despegue ipso facto, a pesar de que estaban al borde de pasar a la llamada V2, la velocidad a la que los aviones levantan el morro y el tren delantero deja de tocar suelo.
De haber actuado con menor velocidad u optado por seguir adelante con el despegue se habrían visto obligados a volar con un solo motor.
Según señala la TVG, aunque el riesgo de que se produjese una salida de pista fue alto, finalmente se evitó esta situación gracias a la veloz maniobra de frenado de los pilotos.
Los pasajeros y la tripulación fueron desplazados a Oporto para volar, finalmente a Barcelona.