El juicio contra el gerente de la constructora Eiriña y contra un alto funcionario del Ayuntamiento de Vigo, acusados de soborno y que se iba celebrar esta semana en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, ha quedado suspendido al no poder completarse el número de candidatos a formar parte del tribunal de jurado.
Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), en la jornada de este lunes no comparecieron dos de las 20 personas que fueron citadas para hacer la selección del tribunal popular, por lo que la vista ha sido suspendida y se ha señalado el inicio del juicio para el próximo 15 de diciembre.
Este caso deriva de una de las piezas separadas de la conocida como operación Patos, que investigó supuestos amaños, prevaricación, tráfico de influencias y otros delitos, en relación con la adjudicación de obras públicas en Vigo, Pontevedra y otras localidades de la provincia.
En el juicio previsto para esta semana se iban a sentar en el banquillo un empresario, Enrique A.P., considerado por los investigadores el 'conseguidor' de esta trama, y el funcionario Álvaro C.C., jefe de servicio del departamento de Fomento (Vías y Obras) del Ayuntamiento de Vigo.
Ambos están acusados de un supuesto delito de soborno y la Fiscalía pide para el empresario 9 meses de prisión; y un año de cárcel y tres años de inhabilitación para el trabajador público.
Según sostiene el ministerio fiscal, el funcionario tuvo al menos dos citas con prostitutas, en 2013 y 2014, que fueron concertadas y pagadas por el empresario. Esos servicios fueron una atención del constructor al funcionario por su cargo y responsabilidad en el Ayuntamiento, donde participaba en procesos de adjudicación de obras.
OPERACIÓN PATOS. La investigación de esa trama saltó a la luz pública en febrero de 2014, cuando fueron detenidos cuatro empresarios y un concejal de Nigrán. A lo largo de la instrucción judicial llegaron a estar investigados casi medio centenar de empresarios, políticos y funcionarios de Vigo y otras localidades de la provincia, y la causa se separó en varias piezas.
No obstante, casi todos los procedimientos fueron archivados porque, según indicó la Fiscalía en su día, muchos de los hechos y comportamientos, si bien "reprochables", no eran calificables como delitos.
De los múltiples frentes abiertos por la operación Patos, solo llegaron a juicio cuatro piezas: una relativa a obras en Nigrán, que se saldó con un acuerdo de conformidad; otra por la adjudicación de una obra en el Puerto de Vigo (en la que tanto el gerente de Eiriña como los otros acusados fueron absueltos); el caso de una adjudicación de una obra de un campo de fútbol en Moraña (que se juzgó el pasado viernes en Pontevedra, con Rafael Louzán y la delegada de la Xunta en Pontevedra, Luisa Piñeiro, entre los acusados); y el caso de supuesto soborno mediante el pago de servicios de prostitución, cuyo juicio ha sido suspendido y aplazado hasta mediados de diciembre.
