SUENA DE fondo Si no estás del gallego Íñigo Quintero. Y la nostalgia que transmite su letra, que ha conseguido colocarse en el número uno mundial de Spotify, se siente acorde al otoño. Una serenidad que se mezcla con la calidez del otoño. También la paleta de colores de la nueva temporada trae consigo la transición de la vivacidad del verano a una calma que se traduce en tonalidades terrosas.
Los marrones y rojos oscuros teñirán los estampados más creativos de las nuevas colecciones. Los clásicos animal print de serpiente y leopardo giran audazmente hacia colores inesperados como el azul eléctrico o el verde esmeralda, con un toque de extravagancia que se entiende gracias al auge de la corriente old money. El clásico escocés también regresa y el estampado floral se manifiesta en tonos más oscuros y misteriosos, con un toque romántico y bohemio. Para una apariencia más contemporánea y urbana, apúntate a la geometría abstracta de las líneas angulares y los círculos.
Del verde al beis
Este otoño nos invita a abrazar la belleza a través de estampados que reflejan la riqueza y diversidad del mundo que nos rodea, pero con máxima sencillez. Así, vestir en colores lisos gana prominencia sobre las prendas estampadas y hay varias razones. Por un lado, los colores sólidos nos permiten combinar prendas de forma sencilla y crear conjuntos muy elegantes sin complicarnos mucho.
Esa simplicidad bien ejecutada y esa elegancia actual se transmiten en el rojo. En su tonalidad más oscura se posiciona como el color dominante de la nueva temporada. Y grandes casas de moda como Chanel, Gucci, Valentino o Fendi han apostado por hacerlo renacer sobre la pasarela. El rojo es pasión y fuerza, así que te recomendamos que te plantees un total look para tus citas más importantes.
Suena difícil de entender que los colores pastel se hagan un sitio entre las tendencias de la temporada otoñal, pero está pasando. El amarillo en su versión más dulce, también denominado butter yellow, pisa fuerte y les regala luminosidad a los estilismos más neutros. Se combinará con otros tonos más clásicos de la paleta como el gris, que es un acierto seguro. Tiene hasta nombre: groufit. Resultado de mezclar las palabras gris y outfit, un chic sobrio muy sofisticado.
Entre los colores llamativos que sobreviven a la oscuridad que se le otorga a la nueva temporada está el verde. Un tono exuberante y evocador de la naturaleza que inyectará vitalidad a todos nuestros estilismos y que, llevado en blusas con vaqueros, puede resultar perfecto para el día a día del ajetreo de la ciudad.
Y el otro gran clásico que sobrevive y se mantiene como uno de los más socorridos es el beis, que llevaremos sobre todo en prendas de punto y gabardinas.