LA TENDENCIA estrella de este verano son el plástico y el vinilo. Parecen una versión moderna y ‘cool’ de los zapatos de cristal de Cenicienta y nos encanta. ¿El responsable? Chanel, por mostrarnos una bota de plástico de cuya suela brotaban rosas (imagen central). 100% PVC, transparente, a todo color, metalizada, con taconazo o plana, es la sandalia ‘it’ de esta temporada. Combínala con tus vestidos veraniegos o con tus vaqueros y una camiseta. La menor del ‘klan’ Kardashian-Jenner, Kylie, se ha sumado ya a este tipo de calzado con una mezcla de sandalia-bota transparente.
Todavía no sabemos cómo va el tema de la comodidad, por eso de que son de plástico… todo es cuestión de probar. Nuestras favoritas: unas de Bershka, de 29,99 euros, con tacón no muy alto completamente transparentes, en azul.
Las sandalias de PVC prometen ser la estrella de este verano, pero no la única. Con aires retro, herederas de los ‘ugly shoes’, nos hacen saltar hasta la época de los últimos años de los 90 y principios de los 2000. Es una sandalia blanca, de tacón medio y con tiras hasta el tobillo. Zara y Mango ya la tienen en sus tiendas y lo mejor es seguir sus consejos. En sus ‘lookbook’ las combinan con total sencillez: jeans blancos o vaqueros.
Como ya ocurrió en 2017, las mules vuelven a ser una de las grandes tendencias de la primavera/verano 2018. Estos zapatos destalonados combinan a la perfección con vaqueros de aire retro, faldas, con americanas o kimonos, biker, camisas blancas y vestidos midi. La curiosidad de este año es que las mules incorporan tacón. Sí, sí,… ¡cómo lo estás leyendo! Pero tacón bajo, de apenas tres o cuatro centímetros. Eso sí, si tú eres de las que cuanto más alto mejor, elige las sandalias doradas o plateadas.
Y es que si quieres triunfar en los próximos meses, tienes que escoger el tacón. Pero si quieres llevarlo bajo, opta por el cuadrado (según se vaya haciendo más alto, más fi no). Los tacones altísimos no son la opción favorita de todas, porque nos hacen daño y nos cansan. Pero si no quieres renunciar a ellos, siempre puedes escoger un diseño bajito y cuadrado.
Este 2018 nos gustan los zapatos feos y brutos. Aunque tampoco nos sorprende después de la fama de Birkenstock y de los ‘granny shoes’, zapatos que fueron desdeñados y que ahora se han asumido hasta tal punto que forman parte de un determinado movimiento. Por este mismo motivo las ‘ugly trainers’ son del 2018.
Durante los 90, las zapatillas anchas deportivas eran usadas exclusivamente por las antimoda y procomodidad. Se encasillaron en la dejadez y en el ridículo. Sin embargo, ese mismo calzado está arrasando porque las marcas de lujo han sabido ofrecer algo casual a las más jóvenes, que rompe con la elegancia. El antídoto perfecto para la seriedad.
