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Abril: el mes 'más invernal' del Cambio Climático

Imagen de la nevada en A Lama del pasado 23 de marzo, hace apenas un mes

EN LAS últimas décadas ha habido una suavización térmica a nivel planetario y hemisferio norte, lo que incluye la península ibérica. Es posible que haya comenzado el cambio climático, ya sea por causas naturales (modificaciones en corrientes oceánicas, manchas solares, etc) o acelerado por las actividades humanas-industriales (contaminación de diversos tipos).

A nivel de la península ibé- rica esa suavización térmica se traduce en la frecuencia de inviernos más suaves y veranos tórridos. Pero en medio de esta situación surge un mes, abril, con temperaturas más frías de lo normal de forma habitual. Incluso en inviernos muy suaves y con escasez de nevadas, llega el mes de abril y revierte en parte la situación con la nevada más importante de la temporada.

En los últimos treinta años, los abriles plenamente invernales fueron los de 1986, 1991, 1998, 2000, 2009 y 2012.

Mención aparte 1986. Batió todos los récords de frío existentes hasta ese momento para ese mes y que siguen vigentes en la actualidad. Se considera el abril más frío en 200 años. Nevó incluso en las costas del Cantábrico, como las ciudades de Bilbao o de San Sebastián.

Durante la Semana Santa de 1998, entre el 10 y el 14 de abril, la mitad norte peninsular, incluida Galicia, sufrió uno de los mayores temporales de nieve de las últimas décadas. La cota de nieve descendió en el Cantábrico hasta los 300 mts, 10 puertos estuvieron cerrados y más de 40 necesitaron el uso de cadenas en toda la geografía peninsular durante esos días. Además, decenas de pueblos de montaña estuvieron aislados en Galicia, Asturias, Cantabria y CyL. Se produjeron avalanchas de nieve en el Pirineo Oscense.

Como anécdota, la copiosa nevada que cayó sobre la localidad pontevedresa de Lalín obligó a suspender la única procesión de Semana Santa de la villa. En los días previos a la entrada del temporal de nieve, Pontevedra ciudad sufrió una de las mayores trombas de agua que se recuerda en las últimas décadas.

El día 3, entre las 8.30 y las 9.00 horas, se acumularon en el observatorio de Aemet en Pontevedra-Mourente 23L/m2, 13L en solo 10 minutos. Las rachas de viento alcanzaron los 68'9 km/h. Y muchas calles de la ciudad resultaron anegadas, especialmente de la zona baja.

Abril de 2000, además de resultar un mes más frío de lo normal en Galicia y el noroeste peninsular, dejó lluvias en gran parte de los días y se acumularon importantes cantidades de precipitación, como demuestra la efeméride de acúmulos del observatorio de Aemet en Ourense (189'1L/m2), Pontevedra-Mourente (429'8L/ m2) y aeropuerto de Vigo-Peinador (477'3L/m2).

Abril de 2012 resultó ser el más frío desde 1986. Después de un invierno muy seco en toda la península ibérica y la ausencia casi total de nevadas de importancia, a lo largo de este mes se sucedieron las nevadas más severas de la temporada, cubriendo de un espeso manto blanco la práctica totalidad de montañas peninsulares.

Otros meses de abril que no llegaron a resultar anormalmente fríos pero en los que sí se produjeron entradas frías de importancia fueron los de 1987, 1994, 1995, 1999 y 2005. En la jornada del 3 de abril de 1987 se dio la temperatura máxima más baja, con 8º para el observatorio de Pontevedra-Mourente.

Durante la entrada fría del 16-18 de abril de 1994, una importante nevada afectó a la montaña de Lugo y a la localidad luguesa de la Fonsagrada.

Y durante la mañana del 21 de abril de 1995, una entrada fría ártica provocó nevadas generalizadas por encima de los 300-400 metros, en lo que se considera la nevada más tardía en cotas bajas de la época reciente en Galicia.

Por el momento, las situaciones rescatadas de nuestra hemeroteca meteorológica son muy distintas al presente abril, en el que estamos disfrutando de tiempo seco y soleado y temperaturas altas. Aún así, muy lejos de lo vivido en abril de 2011, con la mayor ola de calor que sufrió Galicia fuera de temporada en mucho años.

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