TENGO QUE comprarme gafas. Lo admito. El martes le lancé una ligera (ligerísima, oigan) crítica al concejal de Normalización Lingüística de Pontevedra, Alberto Oubiña, por presentarse como jurado en el Certame de Murgas sin disfrazar y él, acertadamente, me mandó recado por Twitter para responderme que sí, que iba disfrazado. Claro, es que yo no había visto una foto que amablemente me ha cedido el fotógrafo Diego Torrado para dar fe, con todos ustedes, queridos lectores, de testigos, de que sí, de que nuestro edil iba disfrazado, aunque me gustó más el del miércoles, de ratoncito. Ahora bien, ¿de qué iba el lunes? Pues no sabría decirles, una especie de Quen é quen? Mr. Escobar. Gracias, Diego, por la foto. Y es que claro, Alberto no estuvo todo el tiempo sujetando este chirimbolo, aunque sí da fe de que no hace falta una infraestructura muy elaborada para disfrazarse, aunque yo, sinceramente, prefieron esos disfraces totales, como el de vampiresa que lució la portavoz de Ciudadanos, María Rey. Así me gusta, María, sin vergüenza.
Pero de lo mejorcito de nuestro Carnaval fue el tremendo barco que se marcaron los chicos de Vamos a Todo para participar en la Noite Pirata. ¡Menudo trabajazo! Casi les encargan una naviera de lo contentos que quedaron en el Concello. Si hasta mi Lores y Carme da Silva acudieron a admirarlo in situ. Y, hablando de admiración, la que yo siento por Jabato. ¿Por quién? Por Javier Fernández, entrenador del Cisne, que este miércoles pasó por nuestra redacción para tomarse un café con los compis de deportes y su homólogo del Teucro, Quique Domínguez. Pero qué guapo y simpático este chico. Y hablando de amores, quiero mandarle un beso muy fuerte a Luly Ayub. Nuestra excompañera, que ahora vive en Argentina, acaba de casarse y la hemos visto feliz y guapísima. ¡Enhorabuena!
