La directora de Saraiva, Lucía Saborido, quiere aprovechar para "felicitar al equipo de Saraiva Marín por este décimo aniversario" y considera que "han cambiado muchas cosas, sobre todo, el concepto de centro para adaptarse a los gustos y necesidades de las personas al envejecer". El germen del centro en la localidad morracense fue la "necesidad importante de apoyar a familiares en el cuidado y la atención de personas mayores, poder dar respuesta a esa necesidad y poder acompañarlas".
Según Saborido, "el centro de día era hace diez años un recurso innovador que permitía que las personas pudiesen vivir en su domicilio. Y sigue siéndolo, si bien ahora las personas que se plantean venir tienen muchas otras necesidades y deseos". Así, "uno de ellos puede ser el poder compartir en un espacio familiar una conversación con alguien afín, aprender nuevas cosas y hacer actividades. Ejercicio físico, estimulación cognitiva, estar activos...". Así, Saborido considera que es "en lo que se está convirtiendo el concepto del centro de día en Marín. Un espacio desde donde apoyamos a la persona y a su entorno en el día a día, así como una forma de relacionarse, de participar en la comunidad".
Saborido está orgullosa de estar "enfocados en hacer que el centro sea una parte activa de la comunidad y que sea un centro abierto donde entren personas, asociaciones, entidades... que forman parte de la comunidad en la que vivimos y que los que forman el centro también salgan y participen del día a día, de la comunidad".
