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El corsario de Pontevedra

«¡Oh! Juan Gago de Mendoza, pedacito de gloria que por la patria y para la patria, a frente de tus 500 hombres supiste conquistar...» así recuerda un poema a Juan Gago que fue un armador, capitán y corsario de Pontevedra conocido porque trabajó como corsario guardián de la ría de Pontevedra, sur de Galicia y norte de Portugal, para la corona española y liberó a Marín de la invasión francesa.

Juan Antonio Gago de Mendoza y Freire de Andrade nace en Casa da Brea, en Seixo, en 1761. Hijo de Xosé Bieito Gago de Mendoza, de profesión escribano, y María Bernarda Freire de Andrade. Sus diez hermanos Antonio Benito, Manuel y José Bernardo le acompañaron en algunas de sus hazañas bélicas.

O Pazo do Chirleu, situado en la bajada al puerto de Aguete, era la casa familiar representada por un enorme escudo, que todavía se puede ver, «timbrado con corona marquesal y un yelmo, completan a decoración unos torsos de efebos que sostienen otros tres escudetes». El escudo contiene los linajes de Gago, Cervela, Figueroa, Mendoza, Agulla, Sotomayor, Montenegro, Sarmiento, Romero de Leis, Araújo y Abreu. Llegó a tener foso, muralla y embarcadero propio para después convertirse en fábrica de salazón, astillero y en la actualidad la sede del Club del Mar. En Pontevedra también era propiedad de la familia el Pazo de la plaza de San José (donde hoy está el café Moderno).

Lo que más llama la atención del personaje en cuestión es su etapa de corsario. A finales del XVIII se definía corsario como «armador pirata, cofario o capre». Y la «patente de corso» era un documento otorgado por reyes o alcaldes en el que se autorizaba al propietario de un navío a atacar barcos y poblaciones de naciones enemigas: «de esta forma el propietario se convertía en parte de la marina del país o la ciudad expendedora». Conocidos corsarios a nuestro favor fueron los Collon, provenientes de Francia, que patrullaron las costas gallegas a finales del siglo XV. Y en contra tenemos a Francis Drake que sometió a un continuo asedio la costa de Vigo y Baiona al servicio de nuestros eternos enemigos, en estas lides en tiempos de Gago de Mendoza y de Pedro Sarmiento de Gamboa: los ingleses. Juan era armador de los corsarios Carmen Vencedor, Prodigioso, Triunfo, Terrible y la goleta corsaria Peregrina Brillante del armador pontevedrés Cosme de la Isla Cobián.

Entre las hazañas más destacables de Juan Antonio como corsario está la derrota de los ingleses en el puerto de Aguete el 22 de agosto de 1800, que tenían como objetivo la fragata Alcudia con un cargamento de plata en sus bodegas. Cuatro días después derrota a los piratas ingleses en la costa de Ferrol al mando de 500 hombres. En documentos de la época se pueden leer las siguientes solicitudes: «8 enero 1801 Don Juan Antonio GAGO DE MENDOZA, armador de tres corsarios de Pontevedra, que ya tiene una medalla de distinción al mérito, solicita graduación militar» y el 9 junio de ese mismo año «Don Juan Antonio GAGO DE ANDRADE, de Pontevedra, armador de los corsarios Carmen Vencedor, Prodigioso, Triunfo y Terrible, que ha capitaneado sucesivamente, pide graduación de Alférez de Fragata».

Parece que los 500 hombres le daban para mucho porque con ese número de combatientes liberó Marín de las tropas napoleónicas, como comandante de las llamadas Alarmas de O Morrazo, sin el permiso de sus superiores, y ganó la batalla de Pontesampaio entre el 7 y 9 de junio de 1809: «Los defensores contaban con dos cañones facilitados por Antonio Gago, de Marín, y tres provenientes de Redondela».

Juan Antonio Gago de Mendoza fallece en 1833, olvidado y sumido en la pobreza por litigios familiares a los 62 años de edad, y está enterrado en la iglesia Santo Tomé de Piñeiro.

El parque de Castrelos y su Palacio-Museo de 1678 perteneció a los Gago de Mendoza y fue donado al Concello en 1918 por su descendiente el Marqués de Alcedo, duque de Santo Magno y Conde de Vañuelas.

Fuentes: www.todoababor.es; “O corsario: vida e tempos de Juan Gago de Mendoza,” de Alberto Fortes; “Gago de Mendoza (1761-1823)”, de Angel G. Carragal; Patrimonio Galego; Antolín Gago de Mendoza y Sánchez y www.cristobal-colon.com.

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