Lunes
Para comenzar a entender lo que sucede en Afganistán basta con ponerse Rambo III y esperar a la dedicatoria final: "a nuestros aliados, los valerosos muyahidines". Como en otros países a lo largo y ancho del mundo, los que un día fueron amigos del Imperio terminaron convertidos en enemigos y así se va tejiendo una historia que ahora nos aterra por partida doble: no queremos creer lo que ven nuestros ojos y no alcanzamos a comprender las consecuencias futuras de esta retirada geoestratégica. Por cierto: si es usted uno de esos que ha aprovechado semejante coyuntura para cargar contra el feminismo, igual debería plantearse la posibilidad de acudir a un médico, a ver si ya existe algún medicamento que quite -o diluya, al menos en parte- la tontería.
Martes
No ha sido este el día más brillante de los alcaldes españoles, al menos para dos de ellos. En Madrid, a José Luís Martínez-Almeida le ha parecido buena idea meterse con el aspecto de Pedro Sánchez y en Gijón, la socialista Ana González ha decidido cancelar la feria taurina porque no le gustan los nombres de dos astados. Uno puede entender que cualquier alcalde decida poner fin al colaboracionismo municipal con una práctica absolutamente anacrónica y falta de compasión, pero conviene tener mucho cuidado con las razones y, sobre todo, con las explicaciones. Que un toro se llame Nigeriano, o Feminista, no quiere decir nada, tan solo que su madre se llamaba Nigeriana o Feminista. En este país se han lidiado astados bautizados como Murciano, Andaluz, Gitano, Judío, Caribeño, Moro Y a nadie se le ocurrió que matar a tan nobles animales resultase ofensivo para los murcianos, los andaluces, los gitanos, los judíos, etc. Si acaso, lo que resulta intolerable es matarlos, sin más, y a eso se debería haber ceñido la señora González para no dar más artillería a quienes se bastan con picas, banderillas, estoques y puñales para desangrar hasta la muerte a tan bello animal y defender tal carnicería.
Miércoles
Abanca ha decidido cerrar su sucursal en Campelo y los políticos locales parecen dispuestos a dar la batalla Pero tampoco mucha. En la praza de A Granxa se dieron cita los portavoces de todas las formaciones con representación en el concello y alguno más, cuyo discurso se parece mucho al de VOX pero que, al menos por el momento, no es VOX. Se habló allí de presentar un frente unido y hasta de boicot, una postura poco y mal explicada por quienes parecen secundar la idea. Que algunos vecinos retiren sus ahorros del citado banco no parece una medida de extrema fuerza pero otro gallo cantaría si BNG, PSOE y BNG predicasen con el ejemplo y organizasen una verdadera revuelta en toda Galicia. La otra solución, se me ocurre, pasa por crear una figura que ayude y asesore a todas esas personas que, principalmente por razones de edad, no se sienten capaces de manejar sus cuentas bancarias mediante las nuevas tecnologías. Cualquier solución será mejor que dejar el descontento existente en manos de "o noso" mutante populismo.
Jueves
Y hablando de frentes comunes, no se debe despreciar la foto que ayer ofreció la Pontevedra política frente al monumento que señala el punto exacto donde fue asesinado Alexandre Bóveda. Hay figuras tan gigantescas en nuestra historia que se escapan al marco concreto de unas siglas, que son de todos, y así parece entenderlo, al fin, un Partido Popular que se presentó al acto con Rafa Domínguez a la cabeza. Lo que allí se vio, a fin de cuentas, fue una imagen que se parece más que ninguna otra al Partido Galeguista en el que militaba Bóveda, con gallegos de izquierdas, gallegos de derechas y gallegos con anhelos independentistas pero, qué carallo, gallegos todos.
Viernes
Que a la filial pontevedresa de VOX no le haya gustado la presencia de Domínguez en A Caeira es un triunfo para todos los pontevedreses: cuanta más distancia marquemos todos con el fascismo alternativo que representan, más tranquilos viviremos... Y si son ellos los que se encargan de marcarla pues qué decir: mejor que mejor.
