Acepta tres años de cárcel por traficar con drogas y agredir a un policía

El juicio se celebró en la Audiencia Provincial. DAVID FREIRE
photo_camera El juicio se celebró en la Audiencia Provincial. DAVID FREIRE

La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra dio carpetazo este martes, por la vía del acuerdo, el juicio contra F.M.J.J., vecino de Vilagarcía que se enfrentaba a importantes penas de prisión por un delito contra la salud púbica y otro de resistencia grave a agente de la autoridad. La vista oral se resolvió por la vía rápida, previo reconocimiento de los hechos por parte del investigado, que aceptó una pena de tres años de cárcel por narcotráfico, tres meses por el atentado y una multa por las lesiones causadas en el marco de la agresión. Para alcanzar tal rebaja en las penas, el fiscal del caso tuvo en cuenta la atenuante de drogadicción, circunstancia acreditada por el acusado, que contrapuso a la agravante de reincidencia que también le era de aplicación. El Ministerio Público no se posicionó a la hora de valorar la suspensión del cumplimiento de la pena de cárcel, una medida que se valorará en la fase de ejecución de sentencia.

Los hechos que fueron juzgados este martes en el Pazo de Xustiza pontevedrés devienen de una intervención del Cuerpo Nacional de Policía que tuvo lugar el 12 de marzo de 2019 en Vilagarcía de Arousa. Ocurrió en la intersección entre la avenida Rosalía de Castro con la calle Moreira Casal. En ese lugar, los funcionarios comprobaron que el acusado se disponía a entregarle sustancias estupefacientes a un comprador que se le estaba aproximando. En un momento dado, el traficante se percató de la presencia de la Policía, por lo que emprendió la fuga empleando una bicicleta de la que disponía en aquel preciso instante y que «solía emplear para el desarrollo de su actividad de venta ilícita de estupefacientes», según explica la Fiscalía.

El sospechoso, que llegó a lanzar una bolsa en su huida, fue interceptado a 200 metros del lugar por los mismos agentes que le seguían. En el marco de su detención, el acusado golpeó a uno de los agentes, que sufrió erosiones en los dedos y pequeñas lesiones en las rodillas y en el codo.

Cuando pudo ser reducido, los policías revisaron las sustancias que tenían en su poder: cocaína, heroína y hachís, todo ello preparado para su venta al menudeo.

Todo el relato de los hechos fue aceptado como cierto por el investigado, que intenta así eludir su ingreso en prisión a cambio de someterse a tratamiento.