La búsqueda por parte del Concello de nuevos locales que le permitan cubrir la creciente demanda de espacios en la villa parece estar dando frutos. Después de años buscando una ubicación idónea para trasladar las oficinas de Aduanas al recinto portuario, el Concello ha encontrado en las antiguas oficinas del Grupo Nogar, situadas junto a la Avenida de Ourense, una alternativa viable.
Según explicó este jueves la alcaldesa, María Ramallo, el Consistorio ya lleva años negociando con la Agencia Tributaria y con la Autoridad Portuaria el traslado de Aduanas, que actualmente ocupa el edificio anexo al Concello, así como la cesión del uso del inmueble a la Administración local.
"Después de barajar varias ubicaciones y ante la opción que surgió de traslado de las oficinas de Ceferino Nogueira se empezó a barajar esta opción como posible", afirma Ramallo, que asegura que en la actualidad todos los organismos implicados en esta operación están trabajando en ella, tratando de tramitar un convenio que sea favorable para todas las partes. En él tendrá que dirimirse qué inversión deberá hacer la AP para adecentar las oficinas y adaptarlas a la actividad de Aduanas y qué cantidad deberá desembolsar el Concello. "Es una muy buena ubicación, que creo que responde a todas las necesidades", reconoce la regidora, que sin embargo incide en que este proceso administrativo se dilatará en el tiempo. "De todas formas, es la mejor opción de cuantas se habían propuesto", asevera.
Cuando la operación de traslado de Aduanas llegue a su fin y se materialice, el Concello podrá dotar al inmueble de la Avenida de Ourense de un uso público. El organismo que le cederá la titularidad es Patrimonio del Estado, propietario actual de la infraestrutura. Aunque es pronto para adelantar cuál será la actividad que se desarrolle en ella, todo apunta a que se crearán nuevas oficinas.
