El alcalde de Vilaboa oficializa entre lágrimas su adiós al Concello

Ya es oficial. Francisco Kiko Costa ha dejado de ser alcalde de Vilaboa en un pleno extraordinario en el que, visiblemente emocionado, hizo entrega de su acta de concejal.

"Voume porque sei que non estou en condicións de ser o mellor alcalde para Vilaboa", explicó Costa, tratando de contener las lágrimas en una sala hasta la que quisieron acercarse más de una decena de vecinos y vecinas de la localidad . Lágrimas que acabaron aflorando a la par que surgían los aplausos de toda la coorporación municipal, incluyendo los de su socia de gobierno y, actualmente, alcaldesa en funciones, Ornela Fernández. La, por ahora, magistrada, que había mostrado su descontento ante la decisión tomada por Costa, le brindó, finalmente, su apoyo. "Puedes contar conmigo", dijo a Costa la edil muy emocionada,

Así, después de 13 meses como alcalde vilaboense y cinco como concelleiro de Medio Ambiente y Deportes, Kiko Costa pone fin a un ciclo. "Non é unha decisión espontánea, levo tempo plantexándomo. O punto de inflexión chegou có estalido da pandemia, entón unha serie de circuntancias persoais comezaron a afectarme, á par que o coronavirus me esixía un aumento da dedicación no meu cargo como alcalde", explicó.

El exregidor no dejó de agradecer en su discurso "o grandísimo esforzo" realizado por su equipo de goberno durante la pandemia de la covid-19. "A etapa máis dura da miña vida foi no confinamento, cando tiven nas miñas máns a saúde e, incluso, a vida da veciñanza. Por iso, dou sinceiramente as grazas polos seus esforzos a este gran equipo de goberno có que tiven a boa sorte de poder traballar".

Kiko confesó no haber querido hacer efectiva su renuncia antes "porque primeiro quería aprobar todos os proxectos que prometera e polos que tanto estivemos traballando". "Considero que o prazo de dez días naturais que marca a lexislación é tempo de abondo para o nomeamento do meu secesor", alegó Costa refiriéndose a la críticas recibidas por parte del BNG, sus socios en el gobierno del bipartito. "Recibín comentarios bastante inxustos con respecto a miña situación, cando o máis responsable que podo facer polos veciños e veciñas deste Concello é presentar a miña renuncia", concluyó.

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Costa cerró su intervención muy emocionado y entre los aplausos de todos los allí presentes. "Hoxe deixo de ser alcalde, volvo ser Kiko, e estarei sempre disposto a axudar no que precisedes", confesó.

La hasta ahora teniente de alcalde, Ornela Fernández, asumirá la alcaldía temporalmente, hasta que se nombre, antes del próximo 20 de agosto, el magistrado definitivo.

Las emociones se desbordaron al final del Pleno. Los miembros de la coorporación municipal rompieron el protocolo sanitario y abrazaron afectuosamente al que, a día de hoy, es ya su ex alcalde.