El edificio consistorial buenense, que alberga las dependencias municipales, será sometidao a un análisis de patologías con el fin de detectar las fisuras del edificio y proceder, en caso de que sea necesario, a acometer mejoras y un refuerzo del inmueble.
Así lo destacó el alcalde de Bueu, Félix Juncal, que indicó que la empresa especializada Bureau Veritas está analizando las grietas de los arcos de piedra de la planta baja, que fueron extendiéndose como consecuencia de la ampliación del edificio y por la sobrecarga de expedientes y departamentos municipales.
Antes de tomar una decisión respecto a las modificaciones, el Gobierno municipal considera imprescindible elaborar un informe sobre las patologías que presenta el edificio, ya que existe la sospecha de que el entramado de la segunda planta no sería el más idóneo para el uso que se le está dando en la actualidad, según destaca el arquitecto técnico municipal.
El inmueble consitorial data de principios del siglo XIX, mientras que la reforma de la segunda planta se realizó en 2002 y comenzó a funcionar en 2006.
El objetivo de esta revisión del estado del inmueble es afinar lo mejor posible los orígenes de los problemas para sopesar cuál podría ser la solución más adecuada. Posteriormente se realizará una pequeña cata de las instalaciones, que consiste en efectuar unos agujeros de reducido tamaño para ver cuál es el estado de los materiales.
Bueu encarga un análisis del estado del consistorio
Una firma especializada está inspeccionando las grietas de la entrada
