El círculo se cierra para el artista marinense Jorge Santiago en el Ateneo Santa Cecilia, donde comenzó sus andaduras recibiendo clases de pintura con tan solo cuatro años de edad y donde ahora él mismo ejerce de profesor para los más pequeños de la villa. Allí expondrá una selección de sus obras junto al cangués Iván Graña, en una exposición para todos los gustos y llena de contrastes. La luz es precisamente el motivo principal de Dilúculo, la muestra conjunta de ambos artistas, que se podrá disfrutar hasta el próximo 10 de noviembre.
¿Cómo surgió esta propuesta creativa?
Iván y yo nos conocemos desde hace años y queríamos hacer una exposición juntos. El problema que nos surgió fue encontrar un punto en común entre nuestras obras porque eran muy diferentes. El nombre, que es un tanto rimbombante, es precisamente un punto de unión porque en mi caso trabajo con luces e Iván con territorio, por lo que pensamos en el amanecer y en el atardecer como puntos en común y ‘Dilúculo’ es la última hora de la noche, un momento entre las dos.
¿Cuál es su especialidad? ¿Qué podremos encontrar en esta exposición?
A esta exposición traigo carboncillo. Tiendo a trabajar con cosas de lo cotidiano, con luces muy marcadas y temática intimista. Suelen ser personajes con una vista introspectiva. En el caso de Iván se está dedicando ahora mismo a la temática de territorio, con unas imágenes por ejemplo sobre las Cíes. La de fotografía en blanco y negro la creó a partir de personas con las que se iba encontrando que le llamaban la atención y a las que fotografió de espaldas haciendo referencia a toda esa gente a la que te cruzas y que no conoces, pero con la que compartes un instante. Son dos propuestas muy diferentes, una con una estética moderna y otra más tirando a lo clásico.
¿Cuál es su vinculación con el Ateneo? ¿Por qué aquí?
Es muy fácil acceder al Ateneo, te lo facilita mucho. Yo empecé aquí con cuatro años en clases de pintura, por eso expongo aquí y no en otro sitio, me siento muy vinculado a él. En segundo de la carrera ya traje aquí mi obra y me hacía ilusión volver a hacerlo. Comencé siendo alumno y acabé siendo profesor.
¿Cómo ve el futuro de los jóvenes artistas? ¿Cree que faltan medios en el sector artístico?
Vivir del arte siempre fue difícil. Sé de mucha gente que se está intentando dedicar a ello y que, con los cuatro concursos que hay al año, malvive. Se tienen que buscar otros medios porque no les da para vivir, solo les permite seguir produciendo obra. Estaría bien que se subvencionase más.
Vivir del arte siempre fue muy difícil. Mucha gente que se intenta dedicar a ello, no le da para vivir
¿Dónde ve su futuro en el mundo artístico?
Mi objetivo es seguir creando obras. Yo creo que es más un hobby, dedicarse a ello profesionalmente es muy duro. Yo no vivo de esto. Estoy preparando oposiciones para ser profesor de secundaria de Dibujo, me encanta la enseñanza y cuando comencé a dar clase aquí fui mucho más consciente de ello.
¿Es una profesión con posibilidades?
Bellas Artes te permite ramificar la profesión, Iván por ejemplo se quiere dedicar al diseño, también te permite profesionalizarte en la ilustración, el audiovisual... Es arte, pero te permite maniobrar.
¿Proyectos de futuro?
Con el covid está mucho más complicado, esta exposición estaba programada para abril y se tuvo que cancelar. Aquí ya esperamos que haya poca presencia, pero estamos barajando llevarla al Auditorio de Cangas como una muestra itinerante. El sistema ya está confeccionado, por lo que es más fácil llevarlo a otros sitios.
